“Tenemos que rescatar lo que significa el ferrocarril para la historia nacional”

Omar González Morales

Periódico La Jornada
Viernes 26 de diciembre de 2025, p. 2

La palabra ferrocarril y el nombre Salvador Zarco Flores (Ciudad de México, 1945) van de la mano en México: desde su histórico apoyo al líder sindical Demetrio Vallejo y su posterior encarcelamiento en Lecumberri, hasta su incansable lucha contra la privatización de ese transporte y posterior desmantelamiento por los gobiernos neoliberales. Todo eso va unido al nombre del director del Museo de los Ferrocarrileros.

El ex dirigente recibió a La Jornada en su casa de la colonia San Felipe de Jesús, en la alcaldía Gustavo A. Madero. En su comedor, el maestro despide a un par de jóvenes que fueron a visitarlo. Desde la mañana trabaja, acompañado por la señora Montserrat, quien lo apoya.

“El ferrocarril es mi vida, a estas alturas es difícil resumir o poner en pocas palabras lo que significa eso para una persona, pero para mí es todo. Ahora tenemos que rescatar lo que significa para la historia nacional y lo importante que es para las generaciones que ahora trabajan en ello”, dijo el líder ferrocarrilero, quien participó en la lucha de estudiantes de 1968.

En su sala sobresalen los cuadros y las fotografías de las maquinarias a las que tanto amor dedicó durante más de media centuria. Aparece él al frente de varias. Su vasta biblioteca está compuesta por libros de la revolución china, biografías de Ho Chi Minh, tomos de México a través de los siglos. Sobre su mesa hay una versión de Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez, y la edición del día de La Jornada. Un café y un panecillo dan sabor a su tarde.

“El museo sigue y seguirá para las nuevas generaciones. Es muy importante que los más jóvenes conozcan lo que significa, las historias, las personas y las luchas que han implicado mantener los ferrocarriles con vida. La historia es fundamental para entender hacia dónde nos dirigimos. Lo considero del mismo modo con nuestros ferrocarriles y me da gusto ver que por fin se estén tomando cartas en el asunto para revivirlos”, comentó.

Por supuesto, su orgullo y cariño estuvieron puestos en las vías. Con su antigua compañera y sus hijos habitó mucho tiempo las zonas cercanas que dan paso a las gigantescas máquinas. Sus gustos por ellas han sido el motor principal del Museo de los Ferrocarrileros, del cual ha estado al frente toda la vida del recinto, que este 2026 cumplirá dos décadas de existencia.

Más tarde llegó a formar parte de los talleres y luego fue mecánico de locomotoras.

En su momento, Salvador Zarco dirigió sus críticas a la política “errónea” en materia de transporte que se aplicó en México en los sexenios neoliberales. “Se ha sostenido que lo más recomendable para el transporte de personas y mercancías son los automóviles, autobuses y camiones, y por ello han gozado de toda clase de subsidios gubernamentales. Sin embargo, lo cierto es que el ferrocarril es el transporte terrestre más barato, cómodo, sustentable y el más seguro”, aseveró el ex líder sindical.

Ubicado donde se encontraba la antigua estación de La Villa, que desde hace más de 50 años dejó de funcionar, pero que en su momento fue uno de los principales puntos de llegada de viajeros para la peregrinación, el museo ahora alberga máquinas, imágenes, figuras y hasta clubes de lectura. Entre sus paredes se encuentran locomotoras como Petra, la cual formó parte de la exhibición realizada en el Zócalo por los festejos por el centenario de la Revolución Mexicana.

Salvador Zarco se llegó al ferrocarril luego de haber estado preso en Lecumberri, tras las protestas estudiantiles de 1968. Ahí conoció a Cayetano Horta, con quien se identificó; después trabajó en Hidalgo y en Veracruz. Participó en las luchas con Demetrio Vallejo y criticó las pésimas condiciones de trabajo en las cuales se encontraban los obreros.

Por desgracia, su salud ha ido menguando por el cansancio causado por el trabajo, la lucha y los varios años que ha estado frente de dicha institución; sin embargo, donde el cuerpo flaquea la voluntad sigue firme.

“Este proyecto es mi vida y la de muchos otros; acá estoy y seguiré.”

Recientemente, Salvador Zarco fue ratificado como director del Museo de los Ferrocarrileros por la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada.

La funcionaria aseguró que será hasta mayo (cuando el recinto cumpla 20 años) que Salvador Zarco permanecerá al frente del recinto, momento en el cual se le realizará un homenaje a su trayectoria y lucha social. Adelantó que será nombrado miembro honorario y vitalicio del consejo asesor del recinto.

Para Salvador Zarco, la lucha no cesa. De frente tiene el compromiso vehemente de mantener el Museo de los Ferrocarrileros como espacio donde se genera comunidad, memoria y se mantiene en alto la dignidad y el concepto de resistencia. “El museo sigue, seguimos. Ahora que han vuelto los ferrocarriles, es indispensable dar también cuenta de la importancia de los ferrocarrileros y sus aportaciones a la vida nacional. No se puede pensar México sin sus trenes, su pueblo, ni la lucha que éste ha hecho”.

El Museo de los Ferrocarrileros se encuentra en Alberto Herrera s/n, colonia Aragón La Villa, alcaldía Gustavo A. Madero.