Chamaquili enseña a los niños a convertir su entorno en poesía
▲ Alexis Díaz-Pimienta cuenta en entrevista con La Jornada que en el momento más complicado de la pandemia en Cuba escribió un poema para que Chamaquili explicara qué era el coronavirus. Ese texto derivó en un programa de televisión donde el niño Lucas Bolaño interpretó al pequeño repentista de la ficción. En la apertura de la 30 edición de la FILH, Lucas y el autor finalmente se conocieron, como se observa en la imagen.Foto tomada de la cuenta oficial de Facebook del encuentro editorial
Anaís Ruiz López
Periódico La Jornada
Domingo 24 de abril de 2022, p. 2
Un encuentro muy esperado por el público cubano se dio en la apertura de la 30 Feria Internacional del Libro de La Habana (FILH), ya que se conocieron personalmente el cuentista Alexis Díaz-Pimienta (La Habana, 1966) y el personaje de su poemario infantil Chamaquili, recreado en televisión por Lucas Bolaño, pequeño de cinco años que mandó mensajes de esperanza durante la pandemia.
En entrevista con La Jornada, el autor explicó: “Chamaquili es una colección de libros infantiles ilustrados por Jorge Oliver Medina. Comencé cuando mi hijo pequeño, Alejandro, era un chamaquili; transformé sus ocurrencias y preguntas en poemas”.
Desde 2006, la editorial Abril empezó a publicar las historias del niño poeta: ¡Chamaquili, Chamaquili!, Buenos días, Chamaquili (2006); Chamaquili en el cuarto de baño (2009); Chamaquili en La Habana (2010); Chamaquili en Almería (2011), también presentado en México; ¿Qué me cuentas, Chamaquili? (2013), y Chamaquili en el Oeste (2013), hasta completar más de 20 títulos.
Educar y sensibilizar
Se trata de un personaje que no define, interpreta y cuestiona su realidad, señaló Díaz-Pimienta. “Chamaquili resuelve sus problemas desde el ingenio, el humor, el asombro y la ternura. Todo lo que ve, todo lo que mira, todo lo que toca, lo convierte en poesía, la cual es imprescindible para la humanidad, principalmente para la infancia, porque no solamente educa, también sensibiliza.
“La poesía hace que el mundo sea mucho más agradable para ellos, desarrolla habilidades lingüísticas y rítmicas. El niño descubre que las palabras tienen música. Soy repentista; es decir, improviso poesía en décimas, es una tradición cubana que en 2017 fue declarada patrimonio inmaterial de la humanidad por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés). En México compartimos esa tradición con el son jarocho y el huapango arribeño.
“En ese país, en 2020, el poeta Mardonio Carballo retomó a Chamaquili, pero escrito con ‘k’, Chamakili, para un proyecto de talleres de escritura creativa en comunidades indígenas. Se añadió la ‘k’ porque pasó al náhuatl”, recordó Díaz-Pimienta.
Cuando escribo para niños regreso a mi infancia; siempre intento limpiar la voz y la mirada de adulto, pienso como si hablara un niño y, ahora que mi hijo es un joven de 20 años, tomo frases de otros pequeños
, detalló el también docente.
Hace tres años se publicó la compilación El gran libro de Chamaquili que en la pasada Feria del Libro de La Habana ganó el Premio del Lector que se le otorga al título de más demanda. Los libros de Chamaquili han recibido tres veces el reconocimiento de la Rosa Blanca, máximo galardón literario que entrega la Unión Nacional de Escritores y Artistas en Cuba.
“Los lectores cubanos tienen una relación con la literatura muy distinta que en otros lugares, pues no hay un vínculo comercial. La literatura se considera y se vive como un derecho real a la satisfacción emocional. En las ferias del libro vemos familias con bolsas llenas, disfrutando de manera muy natural.
Siempre ha sido prioridad que el libro tenga gran alcance, los precios están subsidiados y los escritores publican ampliamente, aunque las impresiones hayan disminuido por la crisis que nos golpea.
El salto a la televisión
Al preguntarle cómo llegó Chamaquili a la televisión, Díaz-Pimienta comentó que cuando la pandemia golpeó fuerte en Cuba, una de las directoras de la compañía de teatro infantil La Colmenita, Claudia Alvariño, “me pidió que escribiera un poema de Chamaquili para explicar a su hijo, Lucas, qué era el coronavirus; allí nació, del libro Chamaquili y la pandemia.
“Es un proyecto magnífico gracias al carisma de Lucas que interpreta al Chamaquili y a La Colmenita, de la cual soy colaborador y fundador. Mandaba los textos y ellos montaban y grababan para la televisión. Este libro todavía es inédito, apenas entrará en el plan editorial de abril para salir el próximo año.
“Lucas y yo no nos conocíamos. Sus padres, Muma, como llamamos cariñosamente a Claudia, y el músico René Baños, somos amigos de muchos años. Todo este tiempo nos comunicamos por Internet, pero este jueves nos conocimos en la FILH y ¡fue maravilloso; tenía ganas de abrazarlo!”
Lucas Baños ganó, en junio, el Premio Espacio en Creatividad, entregado por la Asociación de Comunicadores Sociales de Cuba, por protagonizar a Chamaquili. Además, debido a la popularidad del personaje, la editorial Scripta Manent Ediciones y el grupo Chama-Club: Amigos de Chamaquili convocaron al primer concurso infantil Yo también soy Chamaquili, donde invitan a niños a grabarse en video mientras recitan algún poema de la colección Chamaquili de Alexis Díaz-Pimienta.
Los videos de Chamaquili se pueden ver en el canal de YouTube de La Colmenita: https://www.youtube.com/channel/UCkYqTQtkHILK3lVFzyq-lxA