Nicaragua devela un “tesoro” de obras del orfebre italiano Valadier
▲ Documentos históricos señalan que las 25 obras fueron enviadas en la época colonial a México, donde expertos creyeron que se habían perdido o habían sido destruidas.Foto Afp
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Periódico La Jornada
Domingo 12 de junio de 2022, p. 4
León. La Catedral de León de Nicaragua exhibió el jueves pasado el mayor volumen de obras sacras elaboradas por el insigne orfebre italiano Luigi Valadier en el siglo XVIII, tesoro artístico
que abre un gran misterio: ¿cómo llegaron al país centroamericano?
Se trata de 25 piezas religiosas de cobre dorado y plateadas, de estilo barroco, entre ellas una custodia bendecida por el papa Clemente XIII, que los obispos de Nicaragua han utilizado en sus liturgias desde hace casi 300 años, desconociendo su valor.
Es excepcional que 25 piezas de Valadier estén aquí (…), es el grupo más grande de obras conservadas que hay de Valadier en el mundo
y las únicas
en el continente americano, afirmó el experto en historia del arte, el italiano Xavier Salomon, quien realizó el hallazgo en la Catedral de León.
Según documentos históricos, las obras fueron enviadas en la época colonial a México, donde expertos anteriores creyeron, tras varias investigaciones, que se habían perdido o habían sido destruidas.
Es increíble
que han estado en Nicaragua por casi 300 años. Han pasado por guerras, revoluciones, terremotos y aún están aquí
, donde son utilizadas por obispos y sacerdotes
, resaltó Xavier Salomon, estudioso del arte de Valadier (1726-1785).
El experto, quien también funge de subdirector del museo Frick de Nueva York, consideró el hallazgo como uno de los más grandes tesoros artísticos de Nicaragua
, pero sus materiales no tienen valor económico.
Valadier, nacido en Roma, pero de padres franceses, fue el artista orfebre más importante del mundo en su época. Trabajó con papas y familiares reales de Europa y Rusia.
Sobreviven 400 piezas, (aunque) probablemente originalmente fueron miles
, destacó Salomon.
Valor histórico
Entre las joyas encontradas en Nicaragua figuran dos custodias, 12 candelabros, nueve relicarios, un cáliz y un copón de enorme valor
, destacó.
Algunas de las piezas, como el cáliz plateado finamente esculpido con figuras religiosas y piedras preciosas, tienen el sello de Valadier.
El resto fue identificado con documentos que describen las obras
que el orfebre italiano expuso en Roma en 1767, así como en un inventario de 1771 que guarda la catedral de León, explicó. También se hicieron comparaciones con los diseños originales del artista.
Durante el estudio, que duró un año, descubrieron que hacen falta dos candelabros, y se sospecha que algunas piezas sufrieron modificaciones, como la pequeña cruz que se erige sobre el copón.
El obispo de León, René Sándigo, señaló durante la presentación que una custodia pequeña que creían había sido elaborada en Guatemala, resultó también ser obra de Valadier.
Las piezas seguirán usándose en las liturgias de la catedral, también conocida como la basílica Asunción de la Bienaventurada Virgen María, que en 2011 fue declarada patrimonio de la humanidad por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.
¿Cómo llegaron?
Se dice que estas obras fueron destinadas a una iglesia de México
durante la Colonia española y se está estudiando cómo llegaron
a Nicaragua, que también conserva las cajas en las que fueron enviadas, informó el experto.
Hoy sólo existen las obras del artista que fueron enviadas fuera de Roma, debido a que en aquella época el papa pidió que todo el oro y plata de la Iglesia se fundieran para financiar la defensa contra la invasión de Napoleón
Bonaparte, medida que afectó gran parte de las obras del artista, precisó.
La catedral de León, construida entre el siglo XVIII e inicios del XIX, forma parte importante de la historia de Nicaragua. Allí yace, frente a un león llorando, la tumba del célebre poeta Rubén Darío (1867-1916).
Pese a vivir una historia convulsionada desde la antigüedad con guerras, piratas e invasiones, las obras aún se conservan
en Nicaragua, expresó al vicario de la Diócesis de León, Eliar Alonso.
Después de construir la campana de la basílica de San Pedro, en Roma, Valadier se suicidó al lanzarse al río Tíber, aparentemente por problemas financieros.