Carme Valls endocrinóloga medio ambiente y salud – 10/07/2022 – Podcast Estrictament confidencial
Entrevista a CARME VALLS LLOBET (Barcelona, 1945), endocrinóloga y una de las máximas especialistas mundiales en SALUD y MEDIO AMBIENTE con perspectiva de GÉNERO.
Aparte de la información acerca de la entrevista que aparece aquí, incluyo una reseña acerca de su magnífico libro.
También tuvo un periodo político como diputada del Parlament de Catalunya por PSC-Ciutadans pel Canvi entre 1999 y 2006.
En la entrevista, nos ha hablado de:
1. Los objetivos de su libro.
2. Investigaciones de expertos y suyos en el ámbito de la salud y el medio ambiente.
3. El cuidado desde una perspectiva individual es imprescindible.
4. Dichas medidas son insuficientes sin el establecimiento de políticas medioambientales y sanitarias de carácter global.
5. Por qué se siente optimista a pesar de perspectivas tan pesimitas.
6. Necesidad perentoria de implantar la asignatura de Medicina Ambiental en las Facultades de Medicina y otros estudios superiores de Ciencias de la Salud.
7. Importancia de la perspectiva de género en cuanto a la salud.
8. Paralelismos y diferencias entre los efectos que el medio ambiente tiene en hombres y mujeres.
9. Referencias acerca de Alicia H. Puleo, la autora del prólogo del libro.
10. Aspectos negativos del progreso que se han proyectado en la salud humana.
11. Por qué son más graves las secuelas de la contaminación en mujeres que en hombres.
12. La advertencia que cierra el prólogo: tomar medidas adecuadas y urgentes en nuestra vida cotidiana, individual y colectivamente.
Reseña del libro:
Los principales objetivos del libro1 de Carme Valls-Llobet2, expuestos de forma clara y minuciosa, son informar acerca de los efectos de un medio hostil en nuestra salud, los factores de riesgo que pueden incidir en ella y las recomendaciones a seguir para minimizarlos y, a ser posible, sortearlos con éxito. Asimismo, además de analizar y explicitar las investigaciones llevadas a cabo y los resultados obtenidos por ella misma y por expertos mundiales pertenecientes a los ámbitos de la salud y del medio ambiente, ha incidido en la necesidad de dedicar al cuidado personal los conocimientos alcanzados. Sin obviar que todos ellos resultarán insuficientes a todas luces si no se aplican políticas medioambientales y sanitarias de carácter global ciertamente innovadoras, dada la gravedad de la situación mundial que atravesamos. No obstante, a pesar de la trascendencia del momento actual, no deja de manifestar una actitud positiva que pueda coadyuvar a una consecución exitosa de las finalidades previstas, pero solo si dichas políticas terminan implementándose.
De igual forma, apunta a la necesidad de reforzar la medicina ambiental y de que, desde dicho entorno, se tengan en consideración las consecuencias de un medio hostil con perspectiva de género, puesto que se han podido comprobar los efectos adversos que en las mujeres tiene y que no fueron constatados con suficiente eficacia y veracidad en el pasado. Caber recordar que Carmen Valls-Llobet está considerada una pionera en ese campo —que forma parte del ecofeminismo—, lo cual no ha sido óbice en este libro objeto de reseña para que también dé buena cuenta de las consecuencias en los varones. Precisamente el subtítulo del volumen que reseñamos —«Mujeres y hombres en un mundo de nuevos riesgos»— responde a ese propósito.
El corpus del libro va precedido de un prólogo de Alicia H. Puleo3, quien expone con acierto y brevedad lo que podrá leer el lector a continuación.
Tras dicho prólogo, la autora expone en la introducción los aspectos negativos que el progreso —tal como ha sido entendido por la mayoría hasta ahora— ha proyectado en la salud humana. Aspectos derivados de nuestra disposición depredadora con el medio ambiente. Igualmente, añade que tanto la naturaleza como los expertos llevan ya mucho tiempo avisándonos de que las secuelas de la contaminación son mayores y más graves en mujeres que en hombres, porque alteran la armonía de su ciclo menstrual. Al final de dicha introducción, describe las tres partes del libro y los capítulos de que consta cada una de ellas. Cierra el apartado con el anuncio de que su libro es una advertencia y compendio de recursos para que tomemos medidas adecuadas y urgentes en nuestra vida cotidiana, tanto a nivel individual como colectivo. También aclara, por un lado, que se ha alejado de miradas obsesivas y excluyentes centradas en un único aspecto de los riesgos, porque desgraciadamente hay muchos. Y, por el otro, remarca que es necesario apoyar desde el ámbito político a científicos y sanitarios para que su labor dé resultados eficaces y contundentes.
A continuación y antes de entrar en la primera parte, hay un apartado de agradecimientos de la autora hacia quienes han hecho posible el libro.
El primer bloque de la obra se centra en aquellos aspectos del medio ambiente que pueden afectar a la salud humana y está compuesto por cuatro capítulos. En el primero, constata que hay una relación directa entre medio ambiente y salud y, aunque no esté plenamente reconocida por la sociedad dicha relación, su hipótesis es corroborada por las advertencias de los órganos de gobierno de la Unión Europea incluidos en ese campo, independientemente del área de científicos cuyas investigaciones han sido ya plenamente aceptadas. En el segundo, analiza los variados efectos del medio ambiente en hombres y mujeres, y añade que afectan de forma distinta a los dos géneros y por qué. En el tercero, describe de forma exhaustiva los tóxicos que nos enferman y cómo podemos prevenir su nefasta influencia a nivel individual, si bien remarca de nuevo la importancia de una acción global por parte de los poderes públicos. En el cuarto y último, aporta información acerca de radiaciones y campos electromagnéticos, de cómo inciden en nuestra salud y de qué precauciones deberíamos tomar.
El segundo bloque se interesa por la forma de acceso de los tóxicos ambientales en el cuerpo humano y está compuesto por cinco capítulos. El quinto se ocupa de la contaminación del aire, el sexto de la del agua, el séptimo de la que nos llega a través de los alimentos, el octavo del ambiente doméstico y el noveno de los cosméticos. Apunta especialmente a la incidencia de los tres últimos —contaminación alimentaria, doméstica y cosmética— en la salud. La séptima afecta más gravemente a la población en general; la octava y la novena, a las mujeres. Cada uno de los cinco capítulos termina con un apartado destinado a la prevención; el primero, además, a las medidas colectivas que deberían tomarse.
El tercer y último bloque reflexiona acerca de las consecuencias que la contaminación tiene en la salud de mujeres y hombres, y consta de 7 capítulos. El décimo habla de las alteraciones del ciclo menstrual y de los riesgos que se infieren para la salud y la fertilidad. El undécimo, de cómo afecta la toxicidad ambiental a las condiciones laborales. El duodécimo, de los riesgos ambientales que pueden comportar cánceres de mama, de próstata y de otros tipos. El decimotercero, de la relación entre disruptores endocrinos y obesidad, diabetes y alteraciones de la función tiroidea. El decimocuarto, de la sensibilidad química múltiple. El decimoquinto, de la relación entre la fibromialgia y el síndrome de fatiga crónica y el medio ambiente. Por último, el decimosexto se centra en lo que deberíamos hacer. Todos ellos, excepto el undécimo, terminan con un apartado dedicado a la prevención.
El último capítulo es, además de un compendio de lo expuesto con anterioridad, la verificación de que un medio ambiente envenenado actúa perniciosamente sobre la salud. De ahí la exigencia de actuar de inmediato y de no quedarnos como meros espectadores. Al final, vuelve a insistir en la perentoriedad, no solo de una prevención de carácter individual, sino también del establecimiento de políticas públicas ambientales y sanitarias eficientes. Asimismo, enumera dónde son efectivas y dónde no, y qué características debería presentar un proyecto de carácter global, puesto que el de carácter estatal ya se ha quedado corto ante el alcance de los peligros actuales. También remarca dos aspectos no tenidos demasiado en cuenta hasta ahora: la importancia de estimular una medicina ambiental, nueva y eficaz, para que funcione todo el sistema, y una adecuada formación de los profesionales sanitarios frente a las enfermedades ambientales. Quizás sea el único camino de confirmar sin ningún género de dudas todas las vacilaciones que todavía existen al respecto. Deja para el final una relación de fuentes fidedignas y vuelve de nuevo a recordarnos que la solución más segura solo puede ser colectiva y, sin acusar directamente al sistema económico que nos ha conducido al desastre, lo sugiere en el párrafo último:
«En un tema tan global creo que no sirve la indiferencia, y todos podemos liberarnos de las cadenas ambientales que la humanidad ha creado al estimular un crecimiento y un consumo ilimitados, cuando nuestras vidas y nuestro planeta sí tienen límites».
El libro se cierra con doce anexos3 y un glosario muy ilustrativo.
El primer aspecto del libro que me llamó la atención es meramente anecdótico y tiene relación con el intervalo temporal entre la fecha de publicación del volumen —2018— y la de los últimos datos informativos —unos pocos años antes. No resulta esperanzador, dada la gravedad de la situación que padecemos desde hace ya bastantes años, que este magnífico libro haya tardado tanto tiempo en ser publicado. Quizás seria interesante descubrir por qué.
Una particularidad del libro, a mi entender provechosa, es que, a pesar de la enjundia de lo expuesto y demostrado, puede ser leído por un público amplio y, por tanto, no formado de forma específica en los temas que se tratan. Es, con toda probabilidad, una vía evidente de extender un estado de ánimo responsable a toda la sociedad.
Como también resulta fructífera la sugerencia por parte de la autora de la necesidad de investigar los efectos en la mujer de un medio ambiente envenenado tras comprobar que son peores que en los varones.
De igual modo, es apropiada la introducción al final de casi todos los capítulos de un apartado dedicado a la prevención individual. Además de reiterar en varias ocasiones la importancia de desarrollar políticas públicas medioambientales y sanitarias, no solo de carácter estatal sino también global si queremos zanjar un problema de raíz que es responsabilidad del capitalismo.
No obstante la trascendencia de los peligros que nos acechan, la actitud de la autora es positiva siempre que decidamos actuar con una formación e implicación más amplias y activas de forma global.
El valor del libro es, por tanto, múltiple y multidisciplinar
1 Medio ambiente y salud (Editorial Cátedra, 2018).
2 Carme Valls-Llobet (Barcelona, 1945) es médica endocrinóloga; especializada también en medicina con perspectiva de género. Se dedicó además a la política como diputada del Parlament de Catalunya por PSC-Ciutadans pel canvi entre 1999 y 2006º. Es autora de varias obras dentro del contexto de la salud.
3 (Buenos Aires, 1952). Filósofa feminista y catedrática de Filosofía Moral y Política de la Universidad de Valladolid. Destaca su desarrollo del pensamiento ecofeminista.
4 El primero aporta información sobre dioxinas, el segundo sobre bifenilos policlorados, el tercero sobre ftalatos, el cuarto sobre cómo identificar los plásticos de mayor riesgo, el quinto sobre radiaciones y campos magnéticos, el sexto sobre aplicaciones médicas de las radiaciones no ionizantes, el séptimo sobre valores de la calidad del aire, el octavo sobre la calidad del agua en España y consumo, el noveno sobre aditivos problemáticos para la salud, el décimo sobre salud reproductiva y registro de la temperatura basal, y el undécimo es un cuestionario de evaluación de la Sensibilidad Química Múltiple (SQM).