Atwood no está feliz con el poder de la derecha en EU
▲ La escritora canadiense Margaret Atwood incendió las redes con una fotografía desde Nueva Escocia.Foto tomada de Twitter
▲ Activistas a favor del aborto se manifiestan disfrazadas como personajes de la novela El cuento de la criada, frente a la residencia del embajador de Estados Unidos en Buenos Aires, Argentina.Foto Afp
Alondra Flores Soto
Periódico La Jornada
Martes 26 de julio de 2022, p. 5
Con la frase se los dije
, la escritora Margaret Atwood incendia las redes sociales con una fotografía suya y la breve descripción: En Nueva Escocia con una taza de café, con el eslogan apropiado
.
El contexto nos lleva a El cuento de la criada, su novela más popular, que ofrece al lector un futuro distópico, en el que las mujeres han perdido derechos fundamentales y son obligadas a la esclavitud sexual con el fin de procrear hijos para los líderes de las élites. En una sociedad totalitaria y postapocalíptica, donde la contaminación generó escasez de alimentos, un grupo conservador tomó el control para gobernar en lo que solía ser Estados Unidos.
Con la reciente decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos de suspender el derecho constitucional al aborto en todo el país, se encendió el debate sobre los derechos de las mujeres y la larga lucha para garantizar la decisión de la interrupción voluntaria del embarazo. Con su libro, Atwood desde hace décadas advirtió sobre una ficción que daba miedo y que parece acercarse al presente.
Atwood hizo una nueva declaración en Twitter: “¡Dios mío, algunos de ustedes son buenos leyendo mal! Para ser claros, cuando salió Handmaids Tale en el 85 hubo incredulidad. Pensé que era posible la toma del poder por una derecha religiosa en Estados Unidos y fui la Loca Margaret. Prematura, pero lamentablemente, muy cerca. Eso no me hace feliz”.
En otro mensaje agregó que “en la sociedad de Gilead, en El cuento de la criada, no hay personas abiertamente LGBT+ porque el régimen las ha asesinado y reprimido. Como ha sucedido una y otra vez en muchas épocas y lugares”.
Su fotografía recibió mil 200 mensajes, algunos con severas críticas, otros refrendaron la coincidencia de opinión y unos más estaban en sintonía con el característico sentido del humor de la autora.
El Cuento de la criada se ha convertido en un símbolo en las protestas feministas. En numerosas manifestaciones, las mujeres han vestido con las largas capuchas rojas y el gorro blanco que se obliga a usar en la historia ficticia de Atwood.