Donación de Carlos Pellicer López incrementó a casi 9 mil piezas el acervo del Munal
Donación de Carlos Pellicer López incrementó a casi 9 mil piezas el acervo del Munal
▲ El jueves pasado el Museo Nacional de Arte ofreció un recorrido para la prensa por la exposición Carlos Pellicer: Amistad y memoria. En imagen, cartas incluidas en la muestra.Foto Guillermo Sologuren
Merry Macmasters
Periódico La Jornada
Domingo 31 de julio de 2022, p. 3
El acervo del Museo Nacional de Arte (Munal) incrementó a casi 9 mil piezas con la reciente donación de la colección del poeta Carlos Pellicer Cámara (1897-1977), realizada por su sobrino, Carlos Pellicer López, anunció Carmen Gaitán, directora del recinto, en un recorrido para la prensa de la exposición Carlos Pellicer: Amistad y memoria.
Al asumir su cargo en enero de 2019, el acervo del Munal era de aproximadamente 6 mil 500 piezas, dijo Gaitán. De la donación de 2 mil 77 obras, 651 pertenecen a la colección del poeta y mil 426 del pintor y dibujante Mario Alonso Oztolaza (1912-1989), amigo de la familia, que, por su lado, había heredado Pellicer López.
Gaitán expresó su beneplácito por contar ahora con una obra de Miguel Covarrubias: la tinta sobre papel Bailarina balinesa (1930), al igual que fotografías de Armando Salas Portugal, de las que no tenían, así como una segunda pieza de Carmen Mondragón, conocida como Nahui Ollin, además de aumentar su acervo de obras de José Clemente Orozco, Joaquín Clausell y Gerardo Murillo Dr. Atl, entre otras figuras.
La funcionaria remarcó que la colección de Pellicer Cámara es de índole privado, no de un coleccionista que haya tenido esa intención. Está basada en la amistad, el amor por México y, sobre todo, en ciertos artistas que lo acompañaron a lo largo de su vida. Trabajó en las jornadas culturales a lado de José Vasconcelos, también fue funcionario del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, a la vez que un gran museógrafo involucrado en el Parque de la Venta, en Tabasco, los museos Anahuacalli y Frida Kahlo, en la Ciudad de México
, apuntó Gaitán.
La selección de las cerca de 150 pinturas, fotografías, grabados, dibujos y esculturas llevó más de dos años, continuó la historiadora del arte. Para esta tarea, María Estela Duarte, curadora de la muestra con Pellicer López, junto con los equipos del Munal, trabajó en la casa del sobrino. Integrantes del Centro Nacional de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico Mueble pasaron varios meses registrando y fotografiando la colección, mientras revisaban cuáles obras necesitaban restauración.
Establecer los núcleos temáticos no fue una tarea fácil, sin embargo, el primero, El rostro del poeta y sus entornos, se impuso debido a la cantidad de retratos que había de Pellicer Cámara, desde los realizados por Diego Rivera, Manuel Álvarez Bravo y Rafael Donís hasta figuras menos recordadas como Keómenes Stamatiades. Además, este apartado incluye referencias a sus amistades más cercanas, por ejemplo, la poeta Gabriela Mistral, Frida Kahlo y Roberto Montenegro.
Un segundo núcleo, Entre los siglos XIX y XX, otorga especial énfasis a José María Velasco, incluso se exhiben los dos bastidores cuyas telas pintadas por el paisajista fueron cortadas y robadas de la casa del poeta en octubre de 1976. Al respecto, Carlos Pellicer López señaló que aparte de los dos óleos, también se robaron seis tarjetas postales y dos cartoncitos más grandes, de los que le gustaban mucho a Velasco
.
Siguen los apartados Baluartes del arte mexicano, con obra de Orozco, Dr. Atl y el escultor Mardonio Magaña; Alternancia a la Escuela Mexicana, que cuenta con el cuadro Abrazo equino (1941), que Juan Soriano le regaló al poeta; Práctica del paisaje, sala que también muestra los libros de poesía publicados de Pellicer Cámara, y Diseño y artes escénicas.
El último núcleo, La emoción de Mario Alonso, está dedicado a la obra del artista duranguense, quien nunca quiso exhibir en vida sus pinturas y dibujos. A pesar de que hoy el nombre de Alonso Oztolaza suena desconocido, no lo era tanto en su tiempo, ya que le retrató Roberto Montenegro, pintura que se incluye.
De acuerdo con María Estela Duarte, hay mucho por investigar en la colección de Carlos Pellicer
. Al nombre de Alonso Oztolaza se suman otros como Salvador Conde, un artista oriundo de Tepoztlán, y la misteriosa Vicenta Espinosa cuyo óleo El ancla (1944) se exhibe. Tal vez el poeta compró el cuadro para apoyar a un joven valor, sin embargo, no se han encontrado más datos sobre la pintora, indicó Pellicer López.
La exposición Carlos Pellicer: Amistad y memoria permanecerá hasta mayo de 2023 en el Museo Nacional de Arte (Tacuba 8, Centro Histórico).