Al menos siete heridos en un ataque a un autobús cerca de la Ciudad Vieja de Jerusalén
Al menos siete personas han resultado heridas este domingo, dos de ellas de gravedad, en un ataque con arma de fuego en las inmediaciones de la Ciudad Vieja de Jerusalén, ha informado el servicio de emergencias israelí Magen David Adom. Según las autoridades, el sospechoso disparó hacia un autobús cerca del Muro de las Lamentaciones en la capital de Israel.
Aunque no se ha revelado la identidad del asaltante, las autoridades israelíes han calificado el ataque como un «atentado terrorista» cometido por palestinos; mientras que el grupo islamista Hamás lo ha celebrado como un «acto heroico de resistencia».
Tras una intensa búsqueda de la policía en la zona, el sospechoso de cometer el ataque fue arrestado después de entregarse, y el arma de fuego fue intervenida, ha confirmado un portavoz policial.
Los tiroteos se produjeron alrededor de la 1.30 de la madrugada (22.30 GMT del 13 de agosto) contra un autobús urbano y en un aparcamiento cerca de la Tumba de David, frente a la Puerta de Zion, fuera del barrio amurallado.
El asaltante supuestamente esperó la llegada del autobús y disparó hacia los pasajeros que esperaban para montarse, antes de huir a pie hacia el cercano barrio palestino de Silwan, donde la policía llevó a cabo las operaciones de búsqueda y captura que llevaron a su detención.
Dos heridos graves
De entre los heridos graves, uno es una mujer embarazada de 35 años, cuyas heridas en el abdomen obligaron a un parto de emergencia en el hospital Shaare Zedek. Su vida corre peligro, mientras que la condición del bebé es grave pero estable, según medios israelíes.
Entre los heridos figuran también cuatro miembros de una familia judía ultraortodoxa de EE.UU., que llegaron el miércoles como turistas al país. El padre es otro herido grave, está sedado y conectado a un respirador.
«Jerusalén es nuestra capital y un centro turístico para todas las religiones. Nuestras fuerzas de seguridad están trabajando para restaurar la calma y recuperar el sentido de seguridad en la ciudad», señaló en un comunicado el primer ministro israelí, Yair Lapid.
«Todos aquellos que busquen hacernos daño deberían saber que pagarán el precio por herir a nuestros civiles», añadió el primer ministro en funciones.
Hamás celebra el ataque
Por su parte, el grupo islamista palestino Hamás, que gobierna de facto Gaza, señaló que la «heroica y valiente operación en Jerusalén es una reacción natural a la arrogancia de los soldados de la ocupación (Israel) y los colonos sionistas que cometen cada día crímenes contra nuestra gente, nuestra tierra y los lugares sagrados del islam y el cristianismo».
«Esta heroica operación afirma la continuación de la resistencia en Jerusalén ocupado y los palestinos son conscientes de que la resistencia es la única manera de proteger la tierra y los lugares sagrados», aseveró el portavoz de Hamás Fawzi Barhoum.
El ataque se ha producido una semana después del inicio de la tregua alcanzada el pasado domingo entre Israel y la Yihad Islámica que puso fin a una nueva escalada militar en la que murieron 49 palestinos., incluyendo 17 niños.
Israel sufrió un ola de ataques palestinos entre marzo y abril, en los que murieron 18 personas; mientras que tropas israelíes intensificaron entre abril y julio sus redadas y operativos en Cisjordania ocupada, en las que murieron medio centenar de palestinos y unos mil fueron detenidos por supuestos vínculos con grupos armados.