Estados Unidos ordena a Nvidia restringir las exportaciones de chips a China
El fabricante de semiconductores Nvidia experimenta una caída del 6,5% en el mercado global tras haber anunciado que el Gobierno de Estados Unidos ponía coto a sus exportaciones en China. Así, durante una presentación frente a la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés), la compañía aseguraba que las autoridades norteamericanas le instaron a detener el envío de dos de sus chips de inteligencia artificial (IA) de primer nivel. Una medida que, tal y como han aseverado, podría paralizar la capacidad de las empresas chinas para llevar a cabo operaciones avanzadas y obstaculizar los negocios de Nvidia en la república popular.
Nuevos requisitos de licencia
El desarrollador de chips precisa que la prohibición afecta a sus chips A100 y H100, diseñados para acelerar las tareas de aprendizaje automático para máquinas. Esta situación podría interferir en la finalización del desarrollo del H100, el chip insignia de la compañía que fue anunciado a principios de año. El veto, según fuentes de la firma de semiconductores, «abordará el riesgo de que los productos cubiertos puedan usarse o desviarse a un ‘uso final militar’ o ‘usuario final militar’ en China».
Así, al ser preguntado al respecto, el Departamento de Comercio dependiente de la administración norteamericana no dio detalles sobre qué nuevos criterios ha establecido para los chips de IA, pero aseguró estar revisando sus políticas y prácticas con el gigante asiático. «Si bien no estamos en condiciones de esbozar cambios de política específicos en este momento, estamos adoptando un enfoque integral para implementar las acciones adicionales necesarias relacionadas con las tecnologías, los usos finales y los usuarios finales para proteger la seguridad nacional de EE.UU y los intereses de la política exterior«.
Aumento de la tensión entre potencias
El anuncio, inevitablemente, representa una gran escalada respecto a las tensiones tecnológicas patentes entre Estados Unidos y China, especialmente en un contexto en el que la crisis con Taiwán –enclave donde se fabrican los chips de Nvidia- supone otro gran reto al que hacer frente. Y es que sin los chips estadounidenses de empresas como Nvidia y AMD, las organizaciones chinas no podrán llevar a cabo de manera rentable el tipo de computación avanzada que se utiliza para el reconocimiento de imágenes y voz, entre muchas otras tareas.
El reconocimiento de imágenes y el procesamiento del lenguaje natural son comunes en las aplicaciones de consumo, como los teléfonos inteligentes, que pueden responder consultas y etiquetar fotografías. También tienen usos militares, como buscar imágenes satelitales en busca de armas o bases y filtrar comunicaciones digitales con fines de recopilación de inteligencia.
Exenciones
La compañía americana aseguró que había reservado un total de 400 millones en ventas de los chips afectados este trimestre a China. Estos, dice, podrían perderse si las empresas asiáticas deciden no comprar productos alternativos de Nvidia. Como consecuencia han avanzado sus planes de solicitar exenciones a la regla, aunque “sin garantías” hasta la fecha de que las autoridades americanas le concedan el beneplácito.
La prohibición de chips se produce en un escenario complicado. Nvidia pronosticó recientemente una fuerte caída en los ingresos referidos al trimestre actual debido a una industria de juegos más débil. Aseguró que esperaba ventas en el tercer trimestre de 5.900 millones de dólares, un 17% menos que en el mismo período del año anterior.