Petro habló del “decrecimiento” ante los mineros y defendió su reforma tributaria
Tras la polémica que levantó la propuesta de “decrecimiento económico” de la ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, el presidente Gustavo Petro tuvo su primer encuentro con el sector minero, ante el que hizo algunas propuestas sobre transición energética, defendió su reforma tributaria y respaldó a la funcionaria diciendo que “el decrecimiento es un tema de debate mundial profundo”.
A diferencia de su etapa de campaña, Petro moderó el tono y afirmó que nunca ha dicho que se vaya a detener la actividad minera en Colombia. Incluso invitó a los empresarios del sector a trabajar en la exploración de los “12 minerales que van a ser súper demandados” en el futuro.
El llamado fue a que las empresas empiecen a apuntar hacia la exploración de litio, cobalto, coltán, cobre y manganeso, aunque admitió que es todo un reto saber si Colombia tiene potencial o no en estos, contrario a lo que sucede con el hierro y el níquel, sobre los que ya hay certeza.
El Jefe de Estado también aprovechó la clausura del Congreso Nacional de Minería 2022 para enviar un mensaje claro: la prioridad de su Gobierno será el agua, no el petróleo ni el carbón. En ese orden reivindicó el fallo conocido este viernes en el que el Consejo de Estado le exige al sector minero un reordenamiento para proteger el medio ambiente.
Petro le pidió al gremio que se anime a participar en una misión para construir “la primera gran turbina eólica de Colombia” y “los primeros paneles solares” y también habló de una alianza entre el Estado y los mineros en la que se analicen oportunidades para la producción local de fertilizantes.
A capa y espada
Previo a la intervención de Petro, el presidente de la Asociación Colombiana de Minería (ACM), Juan Camilo Nariño, expresó la preocupación de esa industria por los ajustes que trae la reforma tributaria.
“Incrementaría alrededor de 20 puntos la tributación de la industria, a niveles cercanos a 90% (…) este sector históricamente aportaba a la Nación $5 billones, pero este año va a aportar $14,7 billones”, comentó el líder de la ACM.
Según él, esta última cifra estará explicada en que los buenos precios internacionales de los minerales derivarían en retribuciones generosas para Colombia en materia del impuesto de renta y regalías y por eso le pidió a Petro que en sus “consideraciones internas” tuviera a ese sector.
No obstante, en línea con lo que ha hecho su ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, el presidente defendió a “capa y espada” la reforma, especialmente en los artículos que tocan a la industria minero energética, que tendría que poner $7 billones tal y como está el proyecto.
“Siempre las reformas tributarias se basaban en aumentarle el IVA a la canasta familiar. ¿Seguiremos ese camino en el país mas desigual del mundo?, ¿Creemos que eso se puede hacer porque la sociedad no va a reaccionar?”, le dijo el presidente a los mineros.
“El impuesto (a las exportaciones mineras) lo que está diciendo es: de una propiedad del Estado, a quienes le hemos concedido la explotación pagarán un porcentaje de los ingresos que se les han elevado”, complementó (ver Informe).
Para el Jefe de Estado esta es una manera de disminuir el déficit fiscal “con el menor daño posible”.
Frentes estratégicos
En todo caso, la industria minera tiene claro que la gran apuesta para el cuatrienio será la transición energética. En esa línea, la ACM le propuso a Petro avanzar en tres frentes durante su mandato.
El primero es la conformación de una misión para el conocimiento geológico del país. “Es pasar de un potencial geológico a una certeza que nos permita saber si tenemos cobre y los demás minerales para los alimentos que necesitamos”, comentó el líder de la ACM.
Adicional, los mineros aseguraron estar dispuestos a participar en la “reindustrialización” de Colombia sobre la que el presidente ha hablado desde campaña y le pidieron al Gobierno que los acompañe en el reto de desarrollar su industria con los más altos estándares.
Bastante en juego
Al final del primer cara a cara entre el nuevo gobierno y el sector minero, en el aire quedó cierta desazón, pues todavía no es claro cómo hará el Gobierno para garantizar que los cambios que busca para la industria extractiva no sean abruptos y espanten la inversión; en tanto, sobre la tributaria, a este ramo no solo le preocupa ser el más impactado sino también que no hay claridad en el uso que se le dará a los recursos.
Luis Fernando Mejía, presidente de Fedesarrollo, fue uno de los que se mostró en contra de los nuevos impuestos a las industrias extractivas y sugirió pensar en alternativas como una sobretasa de hasta 3 puntos para el sector minero energético.
De momento, sobre la reforma parece haber poco consenso entre empresarios y Gobierno, aunque los que deciden están en el Congreso.
*Por invitación de la ACM.