José Ignacio Asensio, diputado de Medio Ambiente: «En Gipuzkoa hemos marcado la …
La crisis provocada por la invasión de Ucrania ha hecho que Gipuzkoa acelere su transición energética. José Ignacio Asensio señala que Gipuzkoa está marcando la dirección a seguir con las comunidades energéticas, que estarán presentes en 30 municipios en el año 2023, y con proyectos como el plan para la descarbonización de la industria y el impulso a una planta de hidrógeno verde en Zubieta.
¿Qué podemos hacer frente a la crisis energética provocada por la invasión de Ucrania?
La guerra de Putin ha puesto de manifiesto el peligro que tiene depender de los combustibles fósiles. Tenemos que superar nuestra vulnerabilidad y acelerar la transición energética para asegurar el suministro de energías limpias a precios asequibles, ofreciendo a la ciudadanía y a la sociedad guipuzcoana mejores alternativas para participar en la producción y en la gestión de la energía. En Gipuzkoa lo estamos haciendo con las comunidades energéticas, los planes para descarbonizar la industria o apostando por el hidrógeno verde.
¿Serán estas alternativas capaces de ofrecer respuestas a corto plazo?
Estamos poniendo todo nuestro empeño en que así sea y el caso de las comunidades energéticas es un buen ejemplo; en el primer semestre de 2023, esperamos tener presencia en 30 municipios guipuzcoanos y llegar a 5.000 hogares y pequeños comercios. El modelo está funcionando muy bien: los ayuntamientos ceden las cubiertas de edificios públicos para instalar placas fotovoltaicas, el Departamento de Medio Ambiente y Europa subvencionan la inversión y la ciudadanía se incorpora en condiciones muy asequibles. El ahorro en las comunidades en marcha supera el 30 %, que supone unos 500 euros para un hogar medio. Es una solución rápida, eficaz y ecológica.
¿Es la transición energética la vía para reducir la pobreza energética?
La energía es un bien de primera necesidad y los derechos de la ciudadanía son nuestra prioridad, especialmente los de los 62.500 hogares que están en situación de vulnerabilidad. Un modelo energético socialmente justo pasa por facilitar instrumentos para ganar eficiencia y ofrecer alternativas como el autoconsumo. Es lo que estamos haciendo a través de Argitu y las comunidades energéticas, y el resultado está a la vista; 500 euros anuales es un gran ahorro para una familia y un gran paso para combatir la pobreza energética.
¿Está abordando Gipuzkoa la transición energética de su industria?
La industria guipuzcoana es perfectamente consciente de la importancia de abordar este reto, tanto por el impacto en sus costes de la energía, como por la exigencia creciente de criterios de sostenibilidad para competir en los mercados internacionales. Estamos trabajando en colaboración y hemos puesto en marcha un plan de descarbonización que marque un itinerario y los pasos a dar por nuestras empresas. Nuestro objetivo es un consumo plenamente renovable en 2050 y hemos establecido como objetivo intermedio la reducción de un 40 % de las emisiones en 2030. Este proceso, además de ser una fuente de oportunidades para nuestra industria, tendrá un efecto positivo en la creación de empleo, sobre la salud de las personas, la biodiversidad y la lucha contra el cambio climático.
¿Puede mencionar los pasos que se están dando para descarbonizar la industria?
Además del plan de descarbonización citado, en el que participan más de 60 empresas del territorio, muchas de ellas referentes en su sector, hemos impulsado con ayudas la medición de la huella de carbono en las empresas. Este es el primer paso para determinar las acciones a realizar para disminuir las emisiones. Además, hemos creado un Fondo de Carbono Voluntario para que las empresas puedan compensar sus emisiones con la participación en proyectos como la creación de infraestructuras verdes, que contribuyen a reducir las emisiones del territorio.
¿Es el hidrógeno una opción para nuestra industria o el transporte?
Lo será a medio y largo plazo para las industrias con un consumo intensivo de energía o el transporte pesado. Ya estamos trabajando y Gipuzkoa tiene en marcha una planta de producción de hidrógeno verde, a partir de la materia orgánica procedente de los residuos. El proyecto cuenta con el apoyo y la participación de socios tan importantes como Petronor o Engie. Superada la fase piloto, la instalación tendrá capacidad para abastecer las necesidades de la flota de Lurraldebus. La planta se ubicará en el Complejo Medioambiental de Zubieta y es una apuesta para situar a Gipuzkoa en la vanguardia del sector.