Vallecas mapea los cientos de alcorques vacíos de sus calles: “Puede ser algo controlado y …
Los alcorques vacíos en las calles del madrileño distrito de Vallecas ya han pasado a formar parte del imaginario social del vecindario. Por eso, para cambiar ese imaginario, desde Vallekas Sostenible comenzaron hace semanas una campaña a través de Twitter valiéndose del propio lema que utilizó el Ayuntamiento de la capital en su Plan Alcorques Cero. Y del título institucional, al vecinal. Bajo el hashtag #AlcorquesCero se encuentran decenas de casos de alcorques sin replantar, en mal estado o que directamente el Consistorio ha eliminado colocando adoquines en su lugar.
Manuel Mercadal es miembro del colectivo, vive por la zona de Nueva Numancia y ha sido el encargado de mapear las decenas de alcorques sin árboles que se encuentran en Vallecas tras las quejas de los vecinos y vecinas en la red. Aunque el plano no está actualizado, afirma que han ubicado más de 250 alcorques vacíos: “No queremos hacer nada técnico. Esto nace como una campaña de denuncia para visibilizar lo que ocurre y también como una forma de invitar al vecindario a que reivindique la calidad del espacio público”, comenta.
Traigo un reto. Pago una caña a quien encuentre una plaza en Madrid donde el plan #alcorquesCERO de Almeida supere este éxito 👇
📸 Plaza Milmarcos de Villa de Vallecas: 23 alcorques vacíos (bancos rotos, suciedad… aparte). pic.twitter.com/baEquMN5AS
— Daniel Ayuso Miranda (@Dani_AyusoVk) August 25, 2022
El hecho de que muchos alcorques estén vacíos no es nuevo en el barrio, lleva sucediendo años, ya sea porque se han secado o por los estragos que Filomena causó. “Lo que no entendemos es que se tapen con adoquines algunos alcorques sin justificación alguna. No es que el árbol tape un semáforo o genera un problema de accesibilidad, que sucedía en algunos casos, es que los tapan sin ningún motivo”, relata Mercadal. Vallekas Sostenible sabe que acaba de terminar la jornada en la que no se deben plantar árboles debido a las altas temperaturas, así que esperan que el Consistorio haya tomado nota de sus demandas para este nuevo curso.
Vallecas, donde más alcorques vacíos hay
El Ayuntamiento, por su parte, aseguró en febrero de este mismo año que se plantarían 11.216 alcorques vacíos tras haber recorrido las más de 5.000 calles arboladas de la ciudad para georreferenciar todos los alcorques vacíos y determinar la viabilidad de la plantación. Ya desde un primer momento, el Gobierno de Almeida señaló que los distritos donde más plantaciones se van a realizar en alcorques son Villa de Vallecas, Puente de Vallecas, Fuencarral-El Pardo, Ciudad Lineal y San Blas-Canillejas.
Vallekas Sostenible aguarda con ansia su turno en la plantación, y eso que dos zonas de esa región en concreto encabezan la lista con 1.655 y 1.318 alcorques vacíos respectivamente, las únicas zonas que superan el millar. Por el momento, la plantación alcanza algo más de la mitad de la cifra proyectada, según datos aportados desde el Consistorio de la capital. En el momento de redacción de este artículo, el Ayuntamiento aún no había respondido al por qué se decide tapar con adoquines algunos alcorques o si el Ayuntamiento cuenta con un plan para remodelar aquellas aceras levantadas por la crecida de las raíces que sobrepasan los propios alcorques.
“El hecho de compartir las fotografías y verbalizarlo en redes es muy sorprendente. Si no, corres el riesgo de que pase desapercibido, pongan cuatro adoquines y se olvide, que es lo que queremos evitar”
“Aquí hay casos muy fragrantes, como en la Avenida de la Albufera. Árboles de gran porte, de repente desaparecen, así que el hecho de compartir las fotografías y verbalizarlo en redes es muy sorprendente. Si no, corres el riesgo de que pase desapercibido, pongan cuatro adoquines y se olvide, que es lo que queremos evitar”, desarrolla el vecino de Nueva Numancia.
Miedo a la expulsión del barrio
El buen resultado de la campaña promocionada desde Vallekas Sostenible se conjuga con el temor de sus miembros a que esta situación sea algo “programado y controlado”. Así lo explica Mercadal: “Notamos un agravio comparativo con otros distritos en los que esta situación no se da, como el distrito Centro o el barrio de Salamanca. De nada nos sirve que vayan a hacer un bosque urbano a 10 kilómetros si lo que quieren es que aquí no haya calidad de vida, se devalúen los precios y se expulse al vecindario hacia otros territorios”.
“Es curioso cómo siempre se invierte menos donde más gente vivimos, y eso lo llevo constatando desde hace muchos años”
Beatriz G. C. es vecina de Vallecas, en la zona de San Diego, ha participado en la campaña y también defiende el agravio comparativo al que se refería Mercadal. “Si te das una vuelta por los parques del sur y del norte se nota muchísimo la diferencia, y no creo que la gente sea mejor ni peor en ningún sitio, sino que es cuestión del dinero invertido”, explica. Para ella, como para tantos otros, “es curioso cómo siempre se invierte menos donde más gente vivimos, y eso lo llevo constatando desde hace muchos años”.
Sabe de lo que habla. Década y media en Vallecas, habiendo vivido anteriormente en Villaverde, otro barrio del sur, le hace pensar que habría que llenar las calles de árboles y naturaleza. Y lo dice pensando en sus dos hijos pequeños: “Sobre todo estoy preocupada por el tema de la contaminación. Yo no sé si me quedaré aquí por este tema, pero si me quedo les va a afectar muy negativamente”, reflexiona. De hecho, la falta de zonas verdes próximas le obliga a desplazarse a otras como el parque Tierno Galván, el Juan Carlos I o a Madrid Río. Claro, en coche.
La vegetación urbana, el futuro de la ciudad
El especialista en la materia Guillermo Acero, miembro de Paisaje Transversal, una oficina de planificación y diseño urbano, indica que la tendencia a nivel europeo es clara: “Las ciudades especialmente grandes como Madrid y zonas consolidadas como Vallecas se construyeron sin considerar la necesidad de los espacios verdes, por eso ahora la vegetación urbana es esencial”.
Así pues, las políticas de naturalización y el verde urbano tiene grandes beneficios. Primero, en la mejora ambiental y el impacto que puede tener la vegetación sobre la capacidad de combatir el cambio climático. “Las superficies permeables, como la tierra o las zonas vegetadas, son fundamentales para reducir el efecto isla de calor y funcionan como sumideros de dióxido de carbono, lo que impacta positivamente en el ambiente urbano”, concretiza Acero.
Junto a la cuestión ambiental se encuentra la salud y el bienestar humano. Según el experto, ya está plenamente demostrado el impacto que la percepción del verde tiene sobre la vida y salud emocional y física de las personas, más allá de las posibilidades que ofrecen estas zonas para el ocio y el deporte. En palabras del miembro de Paisaje Transversal, “el salir a tu calle y ver árboles se ha demostrado que reduce los niveles de estrés y ansiedad, y mejora la sensación de bienestar en las personas”.
Vallecas, pero también otros barrios de la capital como Prosperidad, se ideó con una sola idea fija en la cabeza: el coche. Además, mucha naturaleza urbana se fue eliminando con el paso de los años para darle mayor presencia y conseguir, por ejemplo, más plazas de aparcamiento. “Muchas veces se terminan quitando los árboles porque parece que son el elemento que menos importa”, agrega el propio Acero.
“El verde urbano mejora la calidad de vida y este tipo de zonas están muy necesitadas de estas mejoras. Se trata de calles estrechas y poco atractivas en las que un árbol puede aumentar mucho el bienestar de los residentes”
Por eso, para este paisajista resulta imprescindible la toma de conciencia por parte de la ciudadanía si realmente se quiere conseguir una ciudad más habitable. “El verde urbano mejora la calidad de vida y este tipo de zonas están muy necesitadas de estas mejoras. Se trata de calles estrechas y poco atractivas en las que un árbol puede aumentar mucho el bienestar de los residentes”, determina.