Medio Ambiente propone no renovar la autorización de la planta de compostaje de Mazarrón
El polvo en suspensión que se produce en la planta de Pastrana. /
La Dirección General comunica a la plataforma de afectados el resultado negativo del informe realizado por los técnicos
La Dirección General de Medio Ambiente acaba de comunicar a la Plataforma de Afectados por la Planta de Compostaje de Pastrana, en Mazarrón, que «en relación a la solicitud de renovación de Autorización Ambiental Única de la instalación planta de compostaje, ubicada en el polígono 24, parcela 144, paraje Pastrana en Mazarrón (Murcia), el Servicio de Gestión y Disciplina Ambiental ha emitido informe técnico de fecha 2 de febrero proponiendo la no renovación de dicha autorización ambiental» a su actual gestor.
Así reza el comunicado, firmado por el director general Francisco Marín el pasado jueves 23, con el que la Administración regional atiende los derechos de acceso a la información, de participación pública y de acceso a la justicia en materia de medio ambiente de los vecinos de la zona que, desde 2011, protestan por «las molestias que provoca la planta de compostaje de Pastrana y las emisiones de polvo que produce durante el proceso de triturado de maderas y otros residuos».
Expediente sancionador
La portavoz de la plataforma, Jennifer Tanton, explica que desde la Dirección General de Medio Ambiente les han informado también de que el siguiente paso en este proceso será la apertura de un expediente sancionador al gestor de la planta de compostaje de Pastrana, en la que la plataforma ha denunciado en reiteradas ocasiones que se depositan residuos no autorizados, por «ejercicio de actividad sin autorización, tener caducada su autorización e incumplimiento de su autorización».
Así, desde la Plataforma de Afectados por la Planta de Compostaje de Pastrana celebran la decisión de la Dirección General de Medio Ambiente y esperan «que esto suponga la solución definitiva a los problemas» que la planta, dice Tanton, les viene generando desde hace más de una década, y recuerdan que «ya en 2016 se suspendió la actividad por no cumplir los requisitos y en 2019 se produjo un incendio» que les puso en riesgo y también a la ZEPA Sierra de la Almenara, Moreras y Cabo Cope próxima, como denunció en su día Acude.