El colágeno que te rejuvenece daña el medio ambiente – El Tiempo Latino
Mientras los dermatólogos y expertos de la estética hablan sobre los beneficios del colágeno para la piel, el cabello y las uñas, pocos hablan del efecto negativo que la extracción de este elixir mágico tiene sobre el planeta.
La extracción del colágeno, para productos de belleza, ha provocado una gran pérdida de la selva del Amazonas en Brasil y alimenta la violencia hacia los pueblos indígenas que habitan en la región.
¿Qué es el colágeno?
El colágeno es la proteína más abundante del cuerpo y es el principal componente de la piel, los músculos, los huesos, los tendones, los ligamentos y otros tejidos conectivos. Esta proteína le da estructura, resistencia y elasticidad a la piel. Además tiene una amplia gama de usos en la medicina y cosmética.
El colágeno utilizado para fines médicos puede extraerse de la piel del pescado, el cerdo o el ganado vacuno. Específicamente este último (conocido como colágeno bovino) es un subproducto de la industria ganadera, que es responsable del 80% de la pérdida de selva amazónica en Brasil.
Estas reses criadas en granjas que dañan los bosques tropicales se procesaban en mataderos conectados a cadenas internacionales de suministro de colágeno, descubrió una investigación de The Bureau of Investigative Journalism, The Guardian, ITV y O Joio e O Trigo.
La relación entre la deforestación y el colágeno
El colágeno puede tomarse en suplementos. Vital Proteins, propiedad de Nestlé, es uno de los productores de suplementos de colágeno más importantes a nivel mundial, incluso defendido por la actriz Jennifer Aniston.
La empresa brasileña Rousselot, propiedad de la empresa tejana Darling Ingredients, extrae colágeno para los suplementos de salud de esta empresa y la investigación descubrió al menos 2 mil 600 km2 de deforestación vinculada a las cadenas de suministro de dos empresas brasileñas de colágeno relacionadas con Darling: Rousselot y Gelnex, que está en proceso de ser adquirida por Darling por $1 mil 200 millones.
No está claro qué parte de esta deforestación, calculada por el Center for Climate Crime Analysis, está vinculada a Vital Proteins.
La industria del colágeno en Brasil
El colágeno «Peptan» de Rousselot es la marca líder mundial y exporta este colágeno bovino a Estados Unidos y Europa, donde tiene múltiples plantas de fabricación. A diferencia de la carne de vacuno, la soja, el aceite de palma y otros productos alimentarios importantes, el colágeno no está cubierto por la próxima legislación sobre diligencia debida de la Unión Europea y el Reino Unido, diseñada para abordar la deforestación. Por lo tanto, las empresas de colágeno no tienen obligación de hacer un seguimiento de su impacto medioambiental.
Rousselot se abastece de pieles de vaca de BluBrasil, una curtiduría situada en un complejo en Bataguassu, Mato Grosso do Sul. Ese complejo es propiedad de Marfrig, una de las «tres grandes» empresas de carne de vacuno de Brasil. Los proveedores de ganado de Marfrig han sido relacionados con la destrucción de bosques tropicales y la usurpación del territorio del pueblo indígena guaraní kaoiwá.
El efecto sobre las comunidades indígenas
Con el auge de las ventas de carne de vacuno, cuero y colágeno, en los últimos años se ha talado cada vez más bosque para sustituirlo por pastos, y a menudo se han confiscado tierras ilegalmente.
El acaparamiento de tierras durante el gobierno de Jair Bolsonaro también alimentó los ataques contra las comunidades indígenas. En 2021, tercer año de su presidencia, se produjeron 305 invasiones de tierras indígenas lo que supera al triple a las reportadas en 2018 por el Consejo Indigenista Misionero de la Iglesia Católica.
En septiembre de 2022 en el territorio brasileño indígena de Mãe Maria, en Pará, ardió una aldea entera en la que se perdieron decenas de casas, una escuela y una parcela de bosque. Según los habitantes, el incendio no fue accidental y siguen viviendo atemorizados.