Ryugu, el pequeño asteroide que alberga un componente esencial para la vida: el uracilo
Hace más de dos años que las muestras del asteroide Ryugu recogidas por la sonda Hayabusa2, lanzada en 2018 por la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA), llegaron a la Tierra desde el cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter. Fue en 2020 y casi 800 días después los análisis de esas muestras siguen desvelando su composición.
Los científicos de un equipo internacional, dirigido por el profesor asociado Yasuhiro Oba en la Universidad de Hokkaido, han encontrado vitamina B3 y uracilo, que es uno de los componentes básicos necesarios para formar el ARN y cuya función es la de dar instrucciones sobre cómo construir y operar organismos vivos. En las mismas muestras también se detectaron otras moléculas orgánicas consideradas importantes para la síntesis de otras moléculas orgánicas complejas.
Este descubrimiento sugiere, según los autores del hallazgo, que la evidencia de que los componentes básicos importantes para la vida se crean en el espacio y podrían haber llegado a la Tierra por meteoritos sería cierta.
«Los científicos han encontrado previamente nucleobases y vitaminas en ciertos meteoritos ricos en carbono, pero siempre existió la cuestión de la contaminación por exposición al medio ambiente de la Tierra», ha explicado Oba. «Dado que la nave espacial Hayabusa2 recolectó dos muestras directamente del asteroide Ryugu y las entregó a la Tierra en cápsulas selladas, se puede descartar la contaminación».
Los investigadores extrajeron estas moléculas sumergiendo las partículas de Ryugu en agua caliente, seguido de análisis mediante cromatografía líquida junto con espectrometría de masas de alta resolución. Esto reveló la presencia de uracilo y ácido nicotínico, así como otros compuestos orgánicos que contienen nitrógeno.
El uracilo es una de las unidades que componen el ARN, las moléculas que contienen las instrucciones para construir y hacen funcionar los organismos vivos; la niacina es un cofactor importante para el metabolismo en los organismos vivos.
«Encontramos uracilo en las muestras en pequeñas cantidades, en el rango de 6 a 32 partes por mil millones (ppb), mientras que la vitamina B3 era más abundante, en el rango de 49 a 99 ppb», indica Oba en el mismo comunicado en el que se anuncia el hallazgo. «También se encontraron otras moléculas biológicas en la muestra, incluida una selección de aminoácidos, aminas y ácidos carboxílicos, que se encuentran en las proteínas y el metabolismo, respectivamente».
El equipo plantea la hipótesis de que la diferencia en las concentraciones en las dos muestras, recolectadas en diferentes lugares de Ryugu, probablemente se deba a la exposición a los entornos extremos del espacio. También plantearon la hipótesis de que los compuestos que contienen nitrógeno se formaron, al menos en parte, a partir de moléculas más simples como el amoníaco, el formaldehído y el cianuro de hidrógeno.
Si bien estos no se detectaron en las muestras del asteroide, se sabe que están presentes en el hielo cometario, y Ryugu podría haberse originado como un cometa u otro cuerpo principal que estuvo presente en ambientes de baja temperatura.
Además de las muestra llegadas de Ryugu, se espera que este año lleguen a la Tierra las obtenidas del asteroide Bennu por la misión OSIRIS-REx de la NASA, por lo que un estudio comparativo de la composición de ambas proporcionará más datos para fundamentar estas teorías. «La misión OSIRIS-REx de la NASA devolverá muestras del asteroide Bennu este año, y un estudio comparativo de la composición de estos asteroides proporcionará más datos para desarrollar estas teorías», concluye Yasuhiro Oba, coordinador del estudio.