El exministro de economía Jakov Milatovic, del movimiento ¡Europa Ahora!, gana las presidenciales en Montenegro
El exministro de Economía Jakov Milatovic, del joven extraparlamentario movimiento ¡Europa Ahora! (ES), ha resultado vencedor en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Montenegro.
Ha derrotado al actual presidente del país, Milo Djukanovic, candidato del Partido Democrático de los Socialistas (DPS) que ganó la primera vuelta de los comicios celebrada hace dos semanas y ha dominado la política del país balcánico desde hace tres décadas.
Milatovic ha obtenido el 60% de los votos frente al 40% de Djukanovic, según las proyecciones de la organización no gubernamental CeMI, que se basan en el 98% del escrutinio.
«En los próximos cinco años llevaremos a Montenegro a la Unión Europea«, ha prometido Milatovic al proclamar una «histórica victoria». «Esta noche Montenegro ha dicho adiós al último dictador de Europa, al régimen superado y corrupto de Djukanovic, y ha dado un paso hacia un país más rico, igualitario y europeo», ha dicho el presidente electo, que ha asegurado que se dedicará a «la economía, imperio del derecho e integraciones europeas».
Milatovic, de 37 años, un político centrista y proeuropeo, fue ministro de Economía como experto con experiencia en países occidentales en el primer gobierno formado tras la salida del DPS. Tras la caída de ese Ejecutivo en abril de 2022, el economista fundó el ES, un nuevo partido de orientación proeuropea pero al mismo tiempo cercano a Serbia.
Inestable escena política montenegrina
Milatovic promueve el discurso moderado y conciliador y su partido ¡Europa Ahora! está en aumento en la inestable escena política montenegrina.
En Montenegro, país miembro de la OTAN y candidato al ingreso en la Unión Europea (UE), unos 540.000 ciudadanos con derecho a voto estaban llamados a las urnas para elegir al nuevo presidente en las cuartas elecciones presidenciales desde su independencia, en 2006.
El cargo presidencial, que tiene un mandato de cinco años, es protocolario, sin poderes ejecutivos, pero con gran influencia política.