Las reglas del oro: mineros peruanos eliminan el uso de mercurio, en un intento de sanear su sector
La mezcla de oro, arena y tierra se coloca encima de la mesa. Faustino Orosco añade agua y, con sólo pulsar un interruptor, la mesa empieza a temblar. Orosco utiliza una nueva técnica para extraer oro en Madre de Dios, el centro aurífero de Perú, en un intento de sanear la industria.
La mesa vibratoria separa el metal precioso sin necesidad de mercurio, utilizado tradicionalmente para separar el oro, lo que debería reducir los riesgos para la salud y el medio ambiente asociados a la minería.
“Al principio, fue un cambio radical porque afectó a la forma en que organizábamos nuestro trabajo”, dice Orosco, minero artesanal de la concesión minera de Fátima. Algunos mineros y comerciantes desconfiaban de la calidad del oro que producían las mesas de sacudidas, “pero decidimos seguir trabajando y seguir la formación para mejorar y demostrar que es posible”.
Orosco y cuarenta y cinco colegas de cuatro concesiones mineras están a punto de convertirse en los primeros mineros de la Amazonia en obtener la certificación de Oro Ecológico Fairmined, una norma reconocida internacionalmente que confirma que el oro se extrae de forma responsable y garantiza a los trabajadores una tarifa superior por su producto en el mercado internacional.
“Desde hace más de diez años, uno de nuestros sueños era poder producir ‘oro ecológico’ y obtener esta certificación. Y ahora casi lo hemos conseguido”, afirma Vilma Contreras, presidenta de AMATAF (Asociación Minera Tauro Fátima). “Queremos vivir una vida segura y queremos transformar la extracción de oro en la Amazonia en una actividad respetada y legal”.
Sin embargo, introducir cambios sustanciales en la minería de la región requerirá un enorme esfuerzo. La mayoría de las minas de oro de Madre de Dios, en el sureste de Perú, son ilegales, muchas de ellas explotadas por bandas criminales acusadas de apropiación de tierras y de asesinar a cualquiera que intente detenerlas. Se calcula que entre 1985 y 2017 se perdieron 95.750 hectáreas de selva tropical a causa de la minería ilegal.
“Vemos todo tipo de problemas”, dice Jefferson Gonzales Enoki, gobernador regional de Madre de Dios. “Hay trata de personas, narcotráfico, prostitución y bandas criminales. Los índices de criminalidad y la percepción de inseguridad entre los ciudadanos son enormes”.
En 2019, el Gobierno peruano puso en marcha la Operación Mercurio para frenar la minería ilegal en el asentamiento de La Pampa.
“Lo que está ocurriendo ahora en Madre de Dios es la nueva actividad minera que queremos”, dice Enoki. “Queremos actividades mineras eficientes y responsables, sin mercurio, con reforestación y mejores derechos laborales. La formalización garantiza que los mineros realicen sus actividades con permisos y que contribuyan también a la recaudación de impuestos”.
Ocho minas artesanales y de pequeña escala de Perú, Ecuador y Colombia ya han recibido la certificación Fairmined.
France Cabanillas, coordinadora local de la organización estadounidense Pure Earth, que ha formado a los mineros en técnicas sin mercurio y les ayuda a restaurar zonas degradadas de la selva, espera que el dinero extra convenza a más mineros de abandonar sus prácticas ilegales. Pero añade que la estrategia del gobierno para combatir la minería ilegal debe involucrar a más gente. “Podemos transformar la forma en que se extrae el oro en la Amazonia, pero sólo si trabajamos todos juntos: los mineros, el gobierno, los joyeros, los consumidores… todos nosotros”.
Pure Earth pide a la industria joyera internacional que cree conciencia, demanda y cadenas de suministro de oro sin mercurio.
“Queremos poder exportar directamente oro ecológico a un precio justo”, dice Contreras “Queremos vender oro extraído sin mercurio a las empresas y queremos reforestar las zonas comprometidas por la actividad minera. Porque el medio ambiente es responsabilidad de todos”.
Traducción de Santiago Armando