The Last of Us Part I consigue la verificación para Steam Deck
El lanzamiento de The Last of Us Part I en PC fue un auténtico desastre. Este juego llegó con una optimización tan terrible que funcionaba mal en cualquier PC, tanto de gama alta como de gama baja, y presentaba algunas cosas realmente ridículas, como la espera de una hora para compilar shaders, el altísimo consumo de CPU y el enorme consumo de memoria gráfica incluso con las texturas en calidades bajas o medias.
A pesar de que estaba claro que era un juego lleno de problemas y mal optimizado, este juego fue utilizado por algunos como ejemplo máximo para hacer una campaña que decía, en resumen, que las tarjetas gráficas con 8 GB de memoria gráfica estaban muertas, y que ya no valían la pena, un auténtico despropósito que me hace preguntarme qué intereses habría detrás de dicha campaña.
Obviamente no tiene sentido decir que una tarjeta gráfica como la GeForce RTX 3070 está muerta porque tenga 8 GB de memoria RAM, ni porque un juego mal hecho consuma una cantidad absurdamente elevada de memoria gráfica. Al final, la potencia real de la tarjeta gráfica es fundamental, y un consumo elevado de memoria gráfica ocasional se puede resolver fácilmente ajustando ligeramente la calidad de las texturas.
Volviendo a The Last of Us Part I, este juego ha ido recibiendo numerosos parches que están sirviendo para que empiece a parecer una beta. El juego estaba tan mal hecho que con unos parches ha reducido su consumo de memoria gráfica en más de 1,5 GB, y encima ahora se ve mucho mejor configurado en calidad media y funciona con una fluidez mayor en equipos en los que antes iba bastante regular. No era ningún referente técnico, solo un juego mal portado a PC.
El caso es que todas esas optimizaciones y mejoras que ha recibido en forma de parches han hecho posible que The Last of Us Part I consiga la verificación para Steam Deck. Esto quiere decir que, a partir de la versión 1.1, el juego ya está preparado para funcionar bien en dicha consola, todo un logro ya que estamos hablando de un dispositivo que cuenta con una modesta CPU Zen 2 de cuatro núcleos y ocho hilos, 16 GB de memoria y una GPU integrada RDNA2 con 512 shaders.
Con las últimas actualizaciones que ha recibido The Last of Us Part I se han introducido mejoras en el consumo de CPU y GPU, lo que ha ayudado a mejorar el rendimiento en general. También se han reducido los tiempos de compilación de shaders, la carga de texturas, se ha introducido una nueva opción de preajustes gráficos que configura todo en calidad «muy baja», y se ha resuelto un problema de filtrado de memoria que hacía que el juego crasheara en la Steam Deck.