Haití se está quedando sin combustible y alimentos – The New York Times
Esta semana, las calles de la capital se quedaron vacías cuando el transporte público se paralizó y la mayoría de los taxis privados se quedaron sin gasolina. Las sucursales bancarias cerraron cuando los cajeros no pudieron llegar a trabajar. Los hoteles comenzaron a cerrar o a apagar el aire acondicionado para ahorrar energía. Las principales tiendas de comestibles cerraron en la capital al no poder mantener la carne fresca. El martes, el director del centro nacional de ambulancias de Haití aseveró que la escasez de combustible implicaba que solo estaban funcionando 30 de las 90 ambulancias del país.
Según los defensores de los derechos humanos, el debilitamiento de la autoridad del gobierno es consecuencia de su propia estrategia, que no tomó en cuenta las consecuencias de usar a las pandillas para alcanzar sus objetivos.
Este mes, el pastor Jean Ferrer Michel se había estacionado afuera de su iglesia cuando unos hombres armados y enmascarados descendieron de un vehículo del Ministerio de Justicia y se lo llevaron, explicó su hija, Farah Michel. Luego se lo entregaron a una pandilla y, después de que su familia pagó varios rescates, fue liberado el lunes.
Las organizaciones de derechos humanos han acusado al ministro de Justicia, Liszt Quitel, de usar los recursos del gobierno y emplear a una pandilla haitiana para secuestrar al pastor después de haber tenido un conflicto personal con él.
“El auto en el que lo secuestraron venía del Ministerio de Justicia, eso es todo lo que puedo decir”, señaló Michel, la hija del pastor. “Si el Ministerio de Justicia tiene algo que ver con esto, es cosa de ellos, de Dios y de sus madres”.
Michel mencionó que su familia se encuentra bajo amenaza y que piensa abandonar Haití pronto.
“En esta situación no podemos criar a nuestros hijos, dar a luz, ir a trabajar, tener una familia”, comentó. “Es una verdadera pesadilla. No podemos dormir, pero vivimos en una pesadilla”.
El ministro de Justicia, Quitel, no respondió a las múltiples peticiones de comentarios, pero negó las acusaciones a una emisora de radio local.