Minera Los Frailes se prepara para extraer zinc, plomo y cobre – El Español
Hay revuelo en Aznalcóllar. Se prepara una fiesta, afirma a EL ESPAÑOL-Invertia su alcalde, Juan José Fernández, que tiene claro desde hace meses lo que pondrá en la pancarta que la encabezará: «Aznalcóllar vuelve a la vida». Porque, ahora sí, es inminente la reapertura de la mina, hace 25 años protagonista del mayor desastre ambiental de Andalucía, y actualmente, con un proyecto de 450 millones de euros mediante, de nuevo esperanza económica de la localidad.
Este es el ambiente en el municipio, situado a 36 kilómetros al noroeste de Sevilla y comandado por Fernández, exminero y actual alcalde por IU con mayoría absoluta. Un hombre al que le gustan las comparaciones rotundas.
«A nosotros ya nos ha tocado la lotería», lanza, impaciente ante la idea de que los reporteros que llevan dos décadas viniendo a contar el desastre de la rotura de la balsa que llegó a amenazar Doñana -una crisis solo superada por la del Prestige– sean ahora testigos del resurgimiento de este pueblo de 6.000 habitantes.
[Un juez exime a la minera Boliden de pagar a la Junta 90 M€ por el desastre de Aznalcóllar]
Detrás de esa segunda vida está Minera Los Frailes, compañía participada por Grupo México, uno de los mayores productores de cobre del mundo que cuenta con 14 minas en operación en Estados Unidos, Perú y México. Ellos, en consorcio con Minorbis (de Grupo Magtel), ganaron el concurso de adjudicación de la mina en 2015, y tras ocho años de procedimientos y una inversión que primero se cifró en 350 millones y al final ascenderá a 450 millones, por fin están ya en la cuenta atrás.
Hace pocas semanas recibieron la esperada Autorización Ambiental Unificada. No es el último trámite, pero sí el que desbloquea de forma definitiva la reapertura de la mina. Quedan apenas un par de gestiones en la Junta y, finalmente, la licencia por parte del alcalde; será posiblemente la firma más célere de todas.
450 metros de profundidad
Se espera que todo eso esté listo este diciembre o, como máximo, a primeros de enero. Entonces podrán arrancar los trabajos en la corta minera de Los Frailes, una extensión casi circular equivalente a 40 campos de fútbol que ahora está cubierta con una gran balsa de agua de hasta 145 metros de profundidad.
El primer paso será vaciarla. Después las máquinas abrirán un túnel; la explotación será completamente subterránea, a diferencia de lo que sucedió en el pasado. El plan es llegar hasta los 450 metros de profundidad, «150 más» de lo que se introdujo en la tierra la malograda Boliden, subraya a este periódico Miguel Ángel González, director de operaciones de Minera Los Frailes, durante un paseo a la zona.
Es decir, Minera Los Frailes bajará hasta una distancia que equivale a cinco veces el Edificio Telefónica para, a través de un complejo de galerías, extraer zinc, cobre y plomo. La operación interna será con sistemas no tripulados y llegarán a la superficie con transporte en cintas transportadoras.
Saben a qué altura irán encontrando estos minerales. Cuentan con una suerte de mapa elaborado tras 16 meses de estudio geológico en las que han invertido unos 7 millones: el resultado son «testigos», unos cilindros alargados que muestran lo que hay en las sucesivas capas de Aznalcóllar.
Todo esto son parte de los trabajos previos. Desde 2015, la empresa ha invertido más de 50 millones en este proyecto, concretamente en prepararlo y en gestionar ambientalmente el antiguo complejo minero.
Restauración medioambiental
Porque ello forma parte del proyecto. Minera Los Frailes acometerá la restauración integral de los pasivos ambientales de la antigua explotación. Eso implica hacerse cargo de la depuración total del agua que contienen las dos cortas -la de Los Frailes, que será la explotada ahora, y la de Aznalcóllar-, que están circundadas por escombreras que quedaron abandonadas en 1998 y que también serán restauradas.
Asimismo, promete la empresa, se tomarán medidas para evitar que se vuelvan a generar nuevas aguas de contacto en la zona, como el sellado total de la corta de Aznalcóllar con material impermeable, y se recuperará la cuenca de los arroyos en esta zona para que el agua limpia de los afluentes del río Agrio y Los Frailes no se dirija a las cortas.
De la inversión total de 450 millones, el 20% se destinará a actuaciones de carácter de restauración medioambiental. ¿Por qué meterse en un proyecto con semejante sobrecoste? «No existen tantas minas ya descubiertas», responde González. Y Boliden ya había dejado estudios que revelaban el tesoro que se esconde en esta zona. Sigue compensando.
Pasarán tres años desde la primera voladura hasta que la mina esté a pleno rendimiento, dado que debe construirse una planta de tratamiento de aguas y una planta de tratamiento de mineral, que procesará 2,7 millones de toneladas de estos minerales cada año.
El objetivo es obtener 170.000 toneladas anuales de concentrado de zinc, 55.000 toneladas de plomo y 13.000 toneladas de cobre.
Impacto
Entre la miríada de cifras, la que más gusta en el pueblo de Aznalcóllar tiene que ver con el empleo. Minera Los Frailes estima que a lo largo de sus operaciones generará más de 1.200 empleos de alta cualificación y un estimado de 800 empleos inducidos. Sería una de las actividades industriales más relevantes en la región.
En el reparto de inversión, el alcalde señala otra cuantía: 30 millones de euros para inversión social a lo largo de 20 años, el tiempo en el que prevén extraer todos los minerales de la mina. Para entonces, apuntan desde la empresa, quizá se haya descubierto otro yacimiento cercano repleto de posibilidades. «La lotería», insiste el regidor.
Sigue los temas que te interesan