¿Atlantes en la vida real? Los buceadores extremos de la tribu Bajau
En los cómics, existen diferentes personajes que pueden respirar bajo el agua y en la superficie. Dos de los más emblemáticos pertenecen a DC Comics y Marvel, Aquaman y Namor, respectivamente, quienes tienen esta capacidad gracias a mutaciones, cambios en su material genético. En la realidad, los humanos no podemos respirar bajo el agua, pero los buceadores extremos de la tribu Bajau se acercan un poco a la ficción al contar con mutaciones que les permiten bucear por periodos prolongados de tiempo sin la necesidad de salir a tomar aire.
No es Atlantis, sino Indonesia
La historia de los Bajau se desarrolla en la península central de Sulawesi, en Indonesia. Su vida está ligada al mar, al grado que inclusive sus viviendas están construidas sobre la superficie de las hermosas aguas a las que llaman hogar.
¿Cómo no vivir tanto tiempo bajo el agua si tienes este esplendor a tu alrededor?
Su alimentación, como cabría esperar, se basa en la pesca que realizan en mayor medida en los humedales cercanos. Para ello los Bajau no solo utilizan redes, entre sus herramientas también hay lanzas para pesca submarina, actividad para la cual pueden estar hasta 10 minutos sumergidos realizando esfuerzo físico. Estas inmersiones pueden representar el 60% de su jornada diaria.
Una capacidad destacada
A pesar de que el récord de apnea subacuática – es decir, dejar de respirar bajo el agua – es de 24 minutos y 3 segundos, perteneciente al español Aleix Segura Vendrell desde el 28 de febrero de 2016, este logro se consiguió mientras estaba estático. Los nadadores de esta tribu consiguen sus tiempos mientras pescan.
Ambos casos requieren de un intenso entrenamiento, que en el caso de los llamados “nómadas del agua” inicia desde temprana edad.
Desde pequeños la vida de esta tribu se desempeña por encima y debajo del agua.
Esta increíble capacidad ha llamado la atención de diversos científicos, quienes preguntándose si todo era producto del entrenamiento o había algo ocultándose en sus genes, pusieron manos a la obra para desentrañar los secretos fisiológicos y genéticos de estas personas.
¿La aclimatación y el entrenamiento son los responsables?
La aclimatación es un fenómeno fisiológico que nace de la cotidianidad. Gracias a ella, por ejemplo, quienes viven en condiciones climáticas extremas de frío o calor pueden resistirlas, mientras una persona no aclimatada sentirá que se congela o que se está cociendo a temperaturas que los primeros considerarían deliciosas. Esto mismo aplica a muchos entrenamientos físicos.
Para poder entender la raíz de la capacidad de estos buceadores extremos, la doctora Melissa Ilardo, de la Universidad de Copenhague, y su equipo han estudiado dos aspectos clave, sus genes y el bazo, un órgano relacionado con el reflejo de inmersión.
Cuando nos sumergimos, este reflejo automático del cuerpo provoca una pausa momentánea de la respiración, reducción de la frecuencia cardíaca, contracción de los vasos sanguíneos en las extremidades y contracción del bazo.
¿Qué secretos se ocultan a simple vista?
Para poder hacer una comparación más fidedigna, el equipo de investigación analizó el bazo en individuos de esta tribu y de una cercana, los Baluans, quienes se dedican a la agricultura. Los resultados indican que los primeros cuentan con un bazo aproximadamente 50% más grande.
Esto es importante debido a que este órgano, parte del sistema linfático, se contrae para poder abastecer de más oxígeno al cuerpo durante la inmersión. A ello se añaden también otros cambios fisiológicos, como niveles más altos de hormonas tiroideas.
Mutaciones únicas
El segundo componente de la investigación, la genética, encamina los resultados a una raíz proveniente de mutaciones en los genes de los Bajau.
Las primeras se dan en el gen PDE10A, ubicado en el cromosoma 6, que codifica para una proteína de un grupo esencial en ciertos procesos metabólicos. El equipo de investigadores considera que estas mutaciones podrían ser las responsables del incremento del tamaño del bazo.
En segundo lugar, también se encontraron mutaciones en un gen que codifica para un receptor de bradiquina, asociado a la vasodilatación, el gen BDKRB2, ubicado en el cromosoma 14.
Ambos genes serían de suma importancia para entender los cambios fisiológicos que han permitido a este grupo de personas resistir tanto tiempo sumergidos bajo el agua sin la necesidad de una bocanada de oxígeno.
La herencia se ha encargado de mantener la mutaciones de esta tribu.
En la película Black Panther Wakanda Forever, los talokani consiguen la capacidad de respirar bajo el agua gracias a mutaciones provocadas por una planta. En el caso de los Bajau el origen de sus mutaciones es el azar, pero su prevalencia es una evidencia clara de la selección natural a la que todas las especies estamos sometidos.
Si algo queda claro es que los misterios ocultos en los genes y cuerpos de esta tribu no están cerca de ser revelados por completo, ¿qué otras adaptaciones únicas se encuentran ocultas a simple vista?
Referencias: