Medio Ambiente destina 1,5 millones para luchar contra la plaga de muérdago en la Sierra de Baza
Jueves, 11 de enero 2024, 22:39
Desde el año 2016 la Asociación Proyecto Sierra de Baza viene alertando sobre la plaga de muérdago que afecta al Parque Natural de la Sierra de Baza. Ocho años después sigue avanzando sin control, sin que se haga nada efectivo para su erradicación o control. En la actualidad la magnitud alcanzada por la plaga de muérdago está terminando con la vida de miles de pinos, afectando de un modo principal a la zona de pinar del macizo central del espacio protegido, extendiéndose por otras zonas periféricas como es el Monte de Bastidas y la zona de Las Corominas, en el Monte Público de Gor, precisamente es en estas dos zonas, entorno de Bastidas y Las Corominas, donde hay una gran afectación de los pinos, particularmente laricios o salgareños (Pinus nigra) es donde la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía anuncia que va a comenzar a actuar en fechas próximas, dentro el programada denominado «Decaimiento 2», que quiere ser una continuación de la primera actuación que se llevó a cabo en la Sierra de Baza entre los años 2017 y 2018, con las que se quiere continuar afrontando actuaciones urgentes para control del decaimiento forestal y hacer las masas forestales más resilientes ante el incipiente cambio climático que se está viviendo en lugares del sur de España como es la Sierra de Baza.
La actuación a llevar a cabo en las próximas semanas cuenta con un presupuesto total de 1.495.594 euros y entre otras actuaciones contempla el tratamiento y control de la cochinilla del pino resinero (Matsucoccus feytaudi), lo que se quiere hacer en seis rodales, así como la eliminación del muérdago en los pies que se localicen en ramas secundarias y que no afecten al tronco del árbol, mientras que se eliminarán y talarán los árboles que tengan afectados el tronco del árbol o presenten un grado de afectación por muérdago muy alto, ya que por las características del muérdago que tiene unas raíces denominadas haustorios, que penetran varios centímetros en el árbol denominado hospedante, llegando hasta el xilema, de donde toman los nutrientes, el corte o poda del muérdago no impide que la planta se vuelva a reproducir en el árbol hospedante, por lo que se hace necesario cortar las ramas en que arraiga varios centímetros, lo que no es posible cuando el muérdago arraiga en el tronco del árbol, por lo que en todos estos casos la única solución posible para su eliminación es talar el árbol hospedante.
Hace años se anunció la realización de un estudio que entre otras cuestiones estudiaría la posible utilización del muérdago con fines comerciales, pero después nada se supo. El muérdago, dentro de unos límites de poblaciones es una planta beneficiosa para la fauna silvestre, formando parte de los ecosistemas forestales, llegando a estar protegida en muchos lugares. Pero también puede provocar daños en las coníferas ocasionando la disminución en el incremento de su diámetro y afectando a la altura del árbol, pudiendo llegar a provocar, incluso, la muerte del árbol, sobre todos cuando hay déficit de nutrientes o son pocas las precipitaciones, que es lo que está ocurriendo con miles de pinos de la Sierra de Baza, donde el muérdago se ha convertido en una plaga dañina por lo que se hace necesario su control, pues actualmente se encuentra totalmente descontrolada.