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En la actualidad contamos con decenas de opciones para poner manos a la obra en la búsqueda de nuestra media naranja. A pesar de eso, encontrar pareja nunca fue tan difícil como lo es ahora. La infinidad de opciones al alcance de nuestras manos muchas veces nos juega en contra.
¿Por dónde empezamos? ¿Cómo lo hacemos? ¿Cómo nos enfrentamos al posible rechazo? No hay que preocuparnos demasiado en este asunto. Es sorpresivamente más fácil de lo que pensamos. Es por eso que hoy compilamos las seis mejores estrategias para sentirnos más preparados a la hora de comenzar la búsqueda del amor.
1. Amor en línea
La primera estrategia es la que más conocemos todos nosotros. Encontrar personas en línea es una de las maneras más sencillas y utilizadas en este último tiempo. Y es que ni siquiera necesitamos salir de nuestras casas para hacerlo. Todo se encuentra al alcance de nuestras manos; montones de perfiles con imágenes, intereses, e incluso su ubicación actual. Lo único que debemos hacer es elegir a aquella persona que llame nuestra atención y ponernos manos a la obra.
Cabe mencionar que a pesar de su inmediatez y el montón de posibilidades y opciones a encontrar, como las innumerables historias de encuentros causales y amor que surgen en JOYclub, muchas personas encuentran este tipo de medio algo un poco complicado, ya que las conversaciones deben surgir de una de las partes y ser mantenida por ambos. Lo positivo es que sabemos que la persona en cuestión está buscando lo mismo, o algo muy similar que nosotros.
2. Eventos sociales y culturales
Los eventos o actividades culturales son otra gran manera de hallar pareja. Es sencillo entablar una conversación con alguien cuando ya partimos de una base en común: sabemos que está interesado en lo mismo que nosotros. Generalmente, estos eventos se encuentran repletos de personas de distinto tipo, y las conversaciones surgen de manera más natural y menos forzada.
Aunque no sea tan simple acercarse a un desconocido, muchas veces ir con amigos puede hacernos sentir más confiados a la hora de conversar con otras personas. Es una gran opción para también hacer amistades, las cuales pueden florecer a futuro y convertirse en un vínculo más profundo. Exploraremos esa opción más adelante.
3. Grupos de interés común
Todos tenemos algún interés que queremos alimentar o aprender desde cero. Talleres literarios, manuales, clases de teatro, cocina o carpintería, entre otros, siempre hay algún interés del que disfrutamos durante nuestro tiempo libre. ¿Y qué mejor que encontrar a una persona que comparta esta pasión?
Estos grupos generalmente se ven de manera más frecuente que un encuentro esporádico como un evento, lo que ayuda aún más a alimentar un vínculo a lo largo de las distintas clases o encuentros. Una vez más, podemos considerar llevar a un amigo para no ir solos, si es que nos sentimos un poco nerviosos a la hora de hablar con desconocidos por nuestra cuenta. El apoyo puede ayudarnos a salirnos de nuestro caparazón y animarnos a explorar algo nuevo.
4. Amistades
¿Quién nos conoce más que un amigo? Los amigos en común son una gran manera de conocer a otras personas que formen parte de su mismo círculo. Ya sea siendo presentados por un tercero o conociéndolos en alguna celebración en común, no hay que descartar esta oportunidad para conocer gente nueva, con la que probablemente tengamos muchas cosas en común. Al fin y al cabo, compartimos amistades y eso ya es una base muy buena de la cual partir.
Volvamos también a lo que habíamos mencionado previamente. Cabe destacar que tampoco debemos subestimar el poder de las conexiones preexistentes. A veces, el amor puede aparecer a partir de amistades ya consolidadas. Muchas historias de amor comienzan con una conexión previa, ¿y qué mejor que enamorarse de alguien en el que ya confiamos plenamente?
5. Deportes o actividades al aire libre
Los deportes en grupo son una muy buena estrategia para conocer a nuevas personas. Compañeros de running, spinning o incluso alguna persona que frecuente el mismo parque en el que paseamos a nuestras mascotas. Una vez más encontramos qué tener algo en común con el otro es la mejor manera para dar comienzo a un vínculo.
Otro aspecto positivo es que probablemente las personas que frecuentan nuestro mismo gimnasio o parque, vivan en las cercanías de nuestra propia casa. ¿Qué es más fácil que hacer planes con alguien que se encuentra tan cerca de nosotros? Además, esto también significa que las oportunidades de encontrarnos con esa persona son mayores, incluso fuera del contexto de deporte o actividad en común.
6. Viajes
Los viajes son una oportunidad para descubrir nuevos lugares y, tal vez, encontrar el amor. Viajar solos puede ser un desafío. No es fácil animarse a enfrentarse a una multitud de extraños sin el apoyo de un compañero familiar, pero hay que tener en cuenta las grandes posibilidades que surgen a partir de esta aventura.
Ya sea hablar con gente local de la ciudad que estemos visitando, o formar parte de un grupo de viaje, esta es una gran manera para experimentar algo nuevo y animarnos a salir de nuestra zona de confort. Hay algo mágico en explorar destinos románticos y compartir experiencias únicas con personas que cuentan con nuestro mismo entusiasmo.
Para concluir, la mejor manera de encontrar personas es, aunque suene un poco obvio, buscarlas. Muchas veces pensamos que ya hemos barajado todas las posibilidades, pero las opciones son infinitas y podemos encontrar a nuestra media naranja a la vuelta de la esquina.
Puede que vayamos a muchas citas y no sintamos que es la persona indicada, pero no por eso debemos darnos por vencidos. Mientras más práctica ganemos, más sencillo será encontrar personas en nuestro camino y darles una oportunidad. Simplemente, debemos estar abiertos a cualquier posibilidad que se nos pueda cruzar y mantener la cabeza en alto. Incluso algo tan pequeño como hacer contacto visual mientras caminamos por la calle puede terminar en hallar al amor de nuestra vida entre tantas miradas.