Alberto Fernández cierra campaña oficialista con masivo acto en Buenos Aires de cara a legislativas del domingo
Presionado por el alza del dólar paralelo, el creciente descontento social, la ola de inseguridad y la tensión interna en la coalición gobernante, el Presidente argentino, Alberto Fernández, cerró ayer la campaña del oficialismo de cara a las legislativas del domingo, en el Parque Néstor Kirchner, en la localidad de Merlo, en la provincia de Buenos Aires.
Pese a las especulaciones sobre su presencia en el acto de cierre de campaña del Frente de Todos, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner finalmente estuvo presente en Merlo, aunque no se esperaba que realizara un discurso. La vicepresidenta decidió estar en la foto junto a los principales candidatos y funcionarios del bloque oficialista. Según el diario Perfil, Cristina Fernández no viajará hasta Río Gallegos para votar por recomendación médica, tras haber sido sometida quirúrgicamente a una histerectomía.
Fernández comenzó agradeciendo a su compañera de gobierno. “Fuimos a la elección de septiembre convencidos de haber hecho muchas cosas a favor del cambio en la Argentina”, dijo el mandatario en el arranque de su discurso. “Gracias por acompañarnos en este día”, le dijo a la vicepresidenta, en medio de los cantos de los militantes. También hubo un recuerdo a Néstor Kirchner. “Está presente siempre, en cada uno de nuestros días”.
“No es que no hicimos nada, hicimos mucho. Tuvimos que empezar a arreglar el problema de la deuda, nos habían dejado una deuda tremenda con acreedores privados, pero lo resolvimos a nuestro modo, no en cinco minutos”, señaló el presidente argentino, consignó el diario La Nación.
Luego enumeró algunos logros de su gestión: “Terminamos con el impuesto a las ganancias, eso lo hicimos entre todos, el impuesto a las ganancias es algo que trabajó mucho Sergio (Massa) en la Cámara de Diputados, pero también en ese tiempo logramos sacar algo que fue muy innovador, que fue el Aporte de las Grandes Fortunas, y eso lo hizo Máximo (Kirchner)”.
Alberto Fernández aseguró que se tomará el tiempo que haga falta para acordar con el FMI y apuntó contra Mauricio Macri, quien había afirmado que solucionaría el problema “en cinco minutos”. “Ahora estamos teniendo que resolver la deuda que nos dejaron con el FMI. Pero les digo: no lo vamos a resolver en cinco minutos, porque quien lo hace en cinco minutos es porque le da la razón al Fondo. La razón yo se la doy a ustedes, no al Fondo. Me tomaré el tiempo que haga falta”, señaló apuntando a los militantes.
Luego de la derrota en las primarias, y ante la posibilidad de una nueva caída el domingo, el Presidente remarcó la importancia de la unidad. “Soy optimista. Debemos seguir en esta senda. La primera condición que debemos cuidar siempre, porque permanentemente tratan de que no ocurra, es estar unidos. Es lo primero y esencial”, dijo.
“El día que asumí les hice una promesa: primero los últimos. Y será por los últimos que seguiremos trabajando más que nadie. No necesito dar muestras de que eso es lo que quisimos hacer. Somos hijos de Perón y de Eva, somos la continuidad de Néstor y también la continuidad de Cristina”, sostuvo Fernández.
De cara al domingo, cerró: “Quiero que sepan que en los dos años que quedan voy a dejar todo de mí para poder seguir mirando a los ojos a cada argentino (…) Así que el domingo lo que les pido es que me ayuden, nos ayuden, a construir el sueño de la Argentina que nos merecemos”.
El jefe de gabinete, Juan Manzur, no estuvo presente en el acto porque viajó a Tucumán para participar del cierre de campaña de su provincia, donde además es el presidente del Partido Justicialista (PJ). Sin embargo, sí estuvieron presentes en Merlo el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, y el jefe de bloque del Frente de Todos en la Cámara Baja, Máximo Kirchner.
Massa destacó los logros obtenidos por el gobierno en estos casi dos años de gestión. “Sabemos y somos conscientes que ese segundo derrumbe, que fue la pandemia, nos puso en la tarea de tener que evitar dolor, muertes, cadáveres apilados o, peor aún, la pelea de hermanos por un respirador”, dijo. Y luego se refirió al expresidente Mauricio Macri para asegurar que hipotecó el futuro de los argentinos: “Basta con mirar lo que pasa en otros países del mundo. Recuperamos la caída que provocó la pandemia, pero todavía nos falta recorrer el camino de recuperación del derrumbe y el fracaso del gobierno de Macri”.
El acto no contó con la presencia de los gobernadores, solo estuvo Axel Kicillof, de Buenos Aires, porque el oficialismo decidió que el evento tuviera un tono más bonaerense. De hecho, los candidatos y gobernadores del interior harían proselitismo en sus territorios. La prensa argentina señaló que en un comienzo se había pensado en que participaran todos en Merlo, pero la idea fue descartada y se decidió que los cierres de campaña se hicieran en cada distrito.
Esto, porque el acto de cierre nacional había perdido consenso entre gobernadores y alcaldes del Partido Justicialista (PJ) que fueron invitados desde la Casa Rosada, indicó el portal A24. De hecho, algunos se bajaron del escenario y pidieron que en lugar de hacer un acto masivo, fuera restringido a dirigentes y candidatos del Frente de Todos. Las dudas planteadas por alcaldes y gobernadores del PJ se debieron a la necesidad de evitar que un acto tradicional del peronismo pudiera generar más rechazos que adhesiones en el electorado independiente e indeciso al que necesitan llegar.
En un encendido discurso, Kicillof aseguró: “Antes de la pandemia vino la peste del macrismo”, y luego recordó los logros a nivel sanitario para enfrentar la pandemia del Covid-19. El gobernador de la provincia de Buenos Aires dijo: “La pandemia que nos azotó ha sido terrible, pero antes de la pandemia vino la peste del macrismo. Si juntamos pandemia y macrismo venimos de seis años de crisis”.
Existe el consenso de que las deterioradas relaciones del presidente y la vicepresidenta debilitan a la coalición peronista. Esas fricciones quedaron claramente expuestas luego de la derrota en las primarias, de las que Cristina Kirchner hizo responsable al mandatario en una carta pública. “Alberto y Cristina demostraron que no manejan muy bien las emociones. En las primarias fue más fuerte lo que pasó después, que amplificó la derrota. El voto es expectativa sobre la capacidad de gestión y poco se puede confiar si ellos están desunidos”, dijo a la agencia The Associated Press Mariel Fornoni, directora de la consultora Management & Fit.
Los analistas prevén que el domingo se repetirá o incluso se profundizará la derrota que el oficialismo sufrió ante la alianza opositora de centroderecha Juntos por el Cambio en las primarias abiertas y obligatorias de septiembre que consagraron a los candidatos para las legislativas.
En este contexto, unos incidentes y las polémicas declaraciones del Presidente en los últimos días no han ayudado a mejorar las perspectivas de cara al domingo. Fernández dijo en una reunión con candidatos cordobeses del oficialismo que Córdoba “es un terreno hostil”, lo que generó un fuerte rechazo de parte de la oposición y malestar entre el oficialismo, indicó el portal Infobae.
A ello se suman los incidentes como el ocurrido en el barrio La Matanza, donde un comerciante fue asesinado de cuatro balazos durante un robo perpetrado por un hombre que había sido liberado recientemente. Esto generó una ola de indignación y protestas en la zona que terminaron con enfrentamientos con la policía.
Rosendo Fraga, de la consultora Nueva Mayoría, indicó que “sería la cuarta vez consecutiva que el kirchnerismo pierde una elección de medio mandato”. En conversación con The Associated Press, el analista señaló que “habrá un Congreso dividido, con un Senado en el cual el oficialismo quedará debilitado” al no contar con quórum propio para sesionar y “con una suerte de empate de fuerzas en diputados”, donde el oficialismo dejaría de ser la primera minoría y “los dos espacios principales tendrán dificultades para negociar mayorías circunstanciales”.
Durante el día, el Presidente Fernández volvió a instalar el debate por la deuda y apuntó contra el exmandatario Mauricio Macri. “Dejó a la Argentina de rodillas y nosotros la estamos poniendo de pie”, sostuvo en su cuenta de Twitter, acompañado por un video de su predecesor.
“Es muy doloroso escuchar al expresidente Macri tratando de justificar lo que hizo endeudando a la Argentina. La dejó de rodillas y nosotros la estamos poniendo de pie. Sigamos hacia adelante para no volver atrás”, indicó.
Por su parte, Macri y el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se sumaron al cierre de campaña de Juntos por el Cambio, a través de Twitter, y dijeron “basta de atropellos”. “Este domingo vamos a decir basta. Basta a la insensatez, a los privilegios y a los atropellos. Y vamos a decirlo bien fuerte con nuestro voto. Por eso te pido que en tu distrito votes a los candidatos de Juntos por el Cambio para decir basta”, tuiteó Macri.