Los agricultores moderan su protesta en la India entre una baja incidencia de la huelga
Hugo Barcia y Ujwala P.
Kanauja (India), 16 feb (EFE).- Los agricultores indios moderaron este viernes sus intentos de alcanzar la capital del país para exigir al Gobierno de la India garantías legales para su cosecha, en una jornada de huelga nacional que, con escasos incidentes, dejó carreteras y comercios cerrados.
El parón fue convocado en todo el país por cientos de sindicatos agrícolas, que estuvieron detrás de las masivas acampadas que cercaron Nueva Delhi entre 2020 y 2021 para exigir la retirada de varias leyes. Uno de los focos de la huelga de hoy fue el estado norteño de Punjab.
El conocido como ‘granero de la India’ se ha convertido desde el pasado martes en el epicentro de las reivindicaciones agrarias, cuando miles de agricultores emprendieron una nueva marcha hacia la capital para exigir por ley unos precios mínimos de venta sobre la producción (MSP) de todas las cosechas.
Bloqueados por barreras de hormigón y sumidos en una humareda de gases lacrimógenos en los últimos días, en la frontera entre Punjab y Haryana, los agricultores decidieron hoy declarar una tregua temporal para rebajar tensiones.
Uno de los líderes campesinos, Sarvan Singh Pandher, dijo hoy que esperan una nueva ronda de negociaciones con el Gobierno el próximo domingo, antes de decidir si tratan de avanzar hacia la capital.
En el vecino estado de Haryana, la agencia india PTI informó de sentadas de varias horas frente a algunos peajes de las principales carreteras, llevando además a algunas escuelas a declarar festivo este viernes, mientras que el transporte público sufrió severas interrupciones.
Sin impacto en Nueva Delhi
La ciudad de Nueva Delhi apenas se vio impactada por la huelga, más allá del caos generado por el despliegue de las fuerzas de seguridad en algunos puntos fronterizos para cerrar la capital en caso de que los agricultores reanuden su marcha.
El cruce de Ghazipur, que conecta la capital con Uttar Pradesh, fue uno de los más concurridos este viernes, y allí sigue movilizado un amplio dispositivo de seguridad de furgones policiales, contenedores, muros de hormigón y vallas.
En las zonas rurales pegadas a la capital, las labores de los campesinos prosiguieron también sin muchos cambios a pesar de la llamada a la huelga.
En el pueblo de Kanauja, situado en el estado vecino de Uttar Pradesh, tractores cargados con productos de la cosecha seguían circulando con normalidad.
“Estoy haciendo mi trabajo, no soy parte de eso (la huelga), no me afecta”, dijo a EFE uno de estos campesinos al volante de su tractor, sin querer entrar en los motivos de su oposición.
Los negocios transcurrieron también sin problemas en la vecina Ghaziabad, donde decenas de carromatos a ambos lados de la carretera y el mercado principal rebosaban de frutas y verduras. Los vendedores aseguraron a EFE que su suministro no se había visto afectado por la huelga de agricultores.
Un alto mando policial, que no quiso ser identificado, dijo a EFE que no habían experimentado ningún incidente relacionado con la protestas de agricultores, aunque sostuvo que seguirían desplegadas varias unidades los siguientes días.
La protesta de los agricultores se tornó violenta el primer día, cuando los campesinos trataron de retirar las barricadas que les bloqueaban el paso y la Policía les reprimió con gases lacrimógenos y varios arrestos.
Sin embargo, los propios líderes campesinos han instado a mantener la calma desde entonces para que prosperen las negociaciones con el Gobierno.