La vicepresidenta de Vietnam se convierte en presidenta interina
HANOI, Vietnam (AP) — La vicepresidenta de Vietnam, Vo Thi Anh Xuan Xuan, servirá como presidenta en funciones tras la renuncia del expresidente tras poco más de un año en el puesto, según indicó el jueves un diario del Partido Comunista.
Es improbable que la designación de un candidato permanente sea rápida, según los analistas, lo que subraya las crecientes preocupaciones entre inversionistas internacionales por la inestabilidad política en el país del sudeste asiático, un creciente núcleo manufacturero y que se ve entre la lucha de Estados Unidos y China por la influencia global.
Xuan, de 54 años, se convirtió en vicepresidenta en 2021 y ejercerá de presidenta en funciones por segunda ocasión, según el diario Tuoi Tre.
El presidente, Vo Van Thuong, renunció el miércoles debido a infracciones no especificadas que dañaron la imagen y reputación del partido y el estado, según el Partido Comunista. El predecesor de Thuong, Nguyen Xuan Phuc, renunció el año pasado para asumir la “responsabilidad política” de escándalos de corrupción durante la pandemia del COVID-19.
Aunque las infracciones no fueron especificadas, los analistas indicaron que los términos implicados por el partido dejaban claro que el caso estaba relacionado con la campaña anticorrupción.
Que el presidente más joven de la historia moderna de Vietnam, otrora considerado un protegido del líder del Partido Comunista, Nguyen Phu Trong, de 79 años, se convirtiera en el que estuvo menos tiempo en el cargo era un “terremoto político”, dijo Nguyen Khac Giang, analista del ISEAS-Yusof Ishak Institute de Singapur.
Es probable que su renuncia se vea seguida por un proceso de sucesión “muy complicado” dentro del partido, que probablemente se prolongue hasta el crucial Congreso Nacional de 2026, la reunión más importante del partido y donde se determinará el sucesor de Trong, el político más poderoso del país.
Las preocupaciones sobre la salud de Trong han dado más importancia al puesto mayormente ceremonial de presidente. Se trata del tercer cargo en la jerarquía de poder político, pero es el segundo en el escalafón oficial y un buen trampolín para el puesto más importante, dijo Giang.
“Hasta ahora, nadie (…) quería el puesto de presidencia porque no tenía poder. Pero al mismo tiempo, ese puesto pondrá a alguien en una posición muy buena” para optar a convertirse en el próximo líder del partido, señaló.