Venezuela aprobó la creación de un estado en el disputado Esequibo
El Parlamento venezolano aprobó una ley que designa como estado de su país –así llaman a las provincias– al Esequibo, en medio del reclamo centenario de este territorio rico en petróleo administrado por Guyana, país que este viernes denunció a esa declaración como una violación a su soberanía.
El presidente del Parlamento venezolano, Jorge Rodríguez, señaló que la llamada Ley Orgánica para la Defensa de la Guayana Esequiba será remitida al Tribunal Supremo de Justicia para que valide su constitucionalidad. «Cumplimos con el pueblo de Venezuela que salió masivamente a decir cinco veces sí, el 3 de diciembre de 2023», celebró Rodríguez tras la votación, uno de los principales promotores del texto.
La vicepresidente del país, Delcy Rodríguez, también se expresó al respecto. «Venezuela celebra de pie y con su dignidad histórica incólume la aprobación por la Asamblea Nacional del Proyecto de Ley para la Defensa de la Guayana Esequiba», indicó. «Los venezolanos y las venezolanas nunca renunciaremos a nuestros legítimos derechos sobre el territorio de la Guayana Esequiba y así lo expresamos en el referéndum consultivo del pasado 3 de diciembre. ¡El Sol de Venezuela nace en el Esequibo!», remarcó.
La ley fue redactada por el presidente Nicolás Maduro después de un referéndum el 3 de diciembre, en el que el 95 por ciento de los ciudadanos que fueron a votar aprobó la anexión del Esequibo. El texto aprobado aún no fue divulgado y contemplaba la creación del estado Guayana Esequiba, así como inhabilitar políticamente y declarar traidores a quienes favorecieran la causa de Guyana. Según la propuesta, el nuevo estado sería gobernado desde la ciudad de Tumeremo, en el vecino estado venezolano de Bolívar, mientras se escogen autoridades.
La crítica de Guyana
Guyana condenó la aprobación de la ley venezolana. El ministro para Asuntos Locales, Robeson Benn, dijo que lamentaba que Venezuela ignorara la Declaración de Argyle, firmada por los presidentes guyanés, Irfaan Ali, y venezolano, Nicolás Maduro, en diciembre pasado, para que la disputa territorial no escalara a un mayor problema. «Esto es una violación a los principios de buena voluntad que se tomaron en Argyle y luego en Brasil», donde hubo en enero una reunión a nivel de ministros de Exteriores, sostuvo Benn.
En la apertura de la conferencia del Sistema de Seguridad Regional de la Comunidad del Caribe (Caricom), Benn reiteró que la controversia del Esequibo se resolverá en la Corte Internacional de Justicia en La Haya, algo que Caracas rechaza. «Esperemos que Guyana se defienda durante ese proceso, pero reconocemos los riesgos y sabemos de los retos que hay en Venezuela. También estamos preocupados sobre la presencia de otros países que se ubican en la frontera occidental con Venezuela», indicó Benn en referencia a Colombia. Según el ministro, estos otros países aún cuentan con remanentes de los grupos armados como las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, entre otros, involucrados en el narcotráfico y el tráfico de personas.
La CIA se entromete
El Gobierno de Venezuela denunció el jueves una escalada de provocaciones debido a la visita del director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos, William Burns, a Guyana, donde se reunió con el presidente de ese país, Irfaan Ali. «El Director de la CIA, agencia que se auto declara especializada en ‘mentir, engañar y robar’, y que tiene un historial de muerte y destrucción en el mundo entero, visita Guyana», dijo el ministro venezolano de Relaciones Exteriores, Yván Gil, a través de un mensaje en la red social X.
«Esto no es más que una escalada en las provocaciones contra nuestro país, inmiscuyéndose, junto al Comando Sur de los EE.UU., en la controversia territorial por la Guayana Esequiba», manifestó. «El despliegue de la inteligencia estadounidense es una amenaza real, contraria al espíritu de la Declaración de Argyle, y una muestra de los tentáculos perversos de la Exxon Mobil que peligrosamente insiste en crear una situación de peligro en nuestra zona de paz», agregó.
La semana pasada, el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino, aseguró que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) responderá proporcionalmente ante cualquier amenaza que detecte en aguas cercanas al Esequibo, el área de casi 160.000 kilómetros cuadrados bajo pleito.
Conflicto de larga data
El origen de los problemas se remonta a cuando Venezuela se independizó oficialmente de España en 1811. En ese entonces, el Esequibo estaba bajo su dominio pero, años después, los británicos tomaron posesión de algunos territorios, que fueron ampliando hasta conformar la llamada Guayana Británica. Ante el rechazo de Venezuela, la disputa se resolvió mediante un arbitraje internacional, que en 1899 estipuló con el llamado Laudo Arbitral de París, que el territorio quedaba bajo dominio británico.
Venezuela declaró nulo décadas después el fallo y firmó con el Reino Unido el Acuerdo de Ginebra de 1966, que determinó crear una comisión para resolver la controversia. Ese mismo año, tras obtener su independencia de Reino Unido, Guyana pasó a controlar el Esequibo.
Las aguas territoriales del Esequibo contienen grandes reservas de petróleo y gas natural, la mayoría concentradas en el bloque Stabroek. Desde que en 2015 la empresa estadounidense ExxonMobil descubriera crudo en esa zona, Guyana pasó de ser uno de los países más pobres de Sudamérica al de mayor crecimiento económico del mundo (57,8 por ciento en 2022). Estas reservas, que se estiman en unos 11.000 millones de barriles de petróleo, fomentaron, junto a las cuestiones políticas, que las tensiones entre Georgetown y Caracas por Esequibo aumentaran hasta llegar a la actual crisis.