De Guindos aboga por las fusiones bancarias transfronterizas en plena opa de BBVA y Sabadell
El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, vuelve a alentar por las fusiones entre bancos, pero de diferentes países. «Nosotros estamos a favor de la consolidación en Europa, pero siempre con una visión muy favorable a lo que son las consolidaciones transfronterizas, entre bancos de diferentes nacionalidades de origen», expuso este viernes durante unas jornadas organizadas por IESE y FTI Consulting al ser cuestionado de forma genérica sobre las fusiones bancarias en Europa, sin citar la ofensiva de BBVA-Sabadell.
De Guindos aplaudió las declaraciones del presidente de francés, Emmanuel Macron, quien recientemente abrió la puerta a operaciones así en entrevista con Bloomberg y no rechazó la posibilidad de que un banco galo sea comprado por otro competido europeo. «Negociar como europeos significa que hay que consolidarse como europeos», aseguró al ser cuestionado sobre si aceptaría que una entidad como Société Générale pueda ser integrada por una entidad española como Santander.
«Creo que es un mensaje muy adecuado al respecto y, bueno, esa siempre ha sido nuestra posición», apoyó Guindos, subrayando que hoy la banca europea sufre «un problema de valoración».
«A pesar de la mejora de rentabilidades, no ha tenido una mejora en paralelo de sus valoraciones y sigue estando por debajo en valoración, por ejemplo, de la banca de Estados Unidos», apuntó.
Entre los factores que podrían estar detrás de esa dispar valoración mencionó el potencial «superior» de crecimiento de Estados Unidos, que Europa se esté quedando atrás en productividad frente a esa economía y por «la falta de una unión bancaria».
«No tener una unión bancaria, incluso una unión de mercado de capitales completa, pues no ayuda desde el punto de vista de valoración y desde el punto de vista de la comprensión de lo que son los bancos europeos por parte de los inversores institucionales», infirió e insistió en que un proceso de consolidación transfronterizo «sería positivo».
La situación de la banca europea en su opinión es «buena», tiene niveles de capital y de liquidez «elevados», pero dichas valoraciones también se ven afectadas por las dudas del mercado sobre la capacidad de las entidades de mantener las actuales cotas de rentabilidad a futuro.
Según de Guindos, la rentabilidad del sector en Europa tocó el «máximo» en el último trimestre del año pasado y en el arranque de 2024 ya muestra síntomas de «cierta desaceleración». «Siempre hemos dicho que había vientos de cara para el mantenimiento de esas rentabilidades», indicó.
Entre los factores que afectarán a la rentabilidad citó el crecimiento «bajo» de la zona euro, el incremento de los créditos dudosos y «la extensión de la aceleración de los tipos de interés de los pasivos bancarios».
De Guindos valoró por otro lado como «adecuada» la decisión del Banco de España de activar el colchón anticíclico y exigir un extra de solvencia del 1%, aprovechando la «buena» rentabilidad actual del sector.
«El colchón anticíclico es un muy, muy buen instrumento. Aprovecha los tiempos de bonanza y posteriormente su reducción impide que haya un ajuste de crédito cuando llegan los tiempos más complicados y el ciclo empieza a declinar», agregó.