Radio Sonora, un fragmento de su historia… – Marquesina Política
A veces hay que voltear al pasado. Así lo pretende el camarrrada López en su homilía mañanera; pero hay de interpretación a interpretación.
No hace muchos años –jeje—conocí a María Dolores del Rio, recién llegada de Guadalajara egresada de un colegio religioso católico –creo era un convento–; estudio ciencias de la comunicación.
En aquel momento de la historia Hermosillense, iniciaba la Radio Sonora “Una voz para la cultura popular” era su eslogan. Samuel Ocaña era el gobernador del Estado.
El coordinador del proyecto era el Ingeniero Abelardo Rodríguez, un tipazo; lo acompañaba Panchito Hernández y, Arturo Merino director de Radio Universidad de Sonora, Homero Estabillo y Roberto Casaña eran los artífices del contenido de lo que un día fue Radio Sonora.
Según tengo entendido, Arturo Merino contrato a Ricardo Ribeiro y Mónica Luna para realizar lo que vendría ser la producción, tanto musical como de los programas a realizar.
Otros personajes involucrados fueron Armando Moreno Gil, Rossy Gamboa, Panchito Márquez y yo, entre otros que no recuerdo sus nombres, sorry.
Una vez adaptada la vieja casona ubicada en la placita Hidalgo por Calle Gral. Álvaro Obregón 46, Centro, C.P. 83000 aquí en Hermosillo, Son., en oficinas, cabinas de producción, discoteca, y, la cabina de transmisión, Radio Sonora se empezó a escuchar en las ondas hertzianas en el 94.7 FM. y sus repetidoras en el Estado de Sonora.
Recién había iniciado la escuela de ciencias de la comunicación en la Universidad de Sonora y la universidad de la familia Soria Larrea.
El Ingeniero Abelardo Rodríguez, abrió las puertas de Radio Sonora para que los estudiantes iniciaran sus practicas y aprendieran, en la práctica, lo que es “comunicar” a la sociedad.
Homero fue su primer director oficialmente hablando; luego, llego Jossy Robles y, aquellos estudiantes practicantes, asesorados y engañados por el Che Ribeiro y Mónica Luna, se opusieron a que la directora fuera Jossy Robles –ninguno la conocía–.
Aquí viene lo interesante. La persona que encabezaba “el movimiento” era nada más y nada menos que María Dolores del Rio –atrás de ella estaban El Che y Luna– que, incluso, los estudiantes la proponían como solución del “conflicto” fuera ella la directora.
Viene este fragmento de la historia pues veo que la señora sigue con sus berrinches para sacar tajada a sus intereses personales. Lo hizo en el PAN que le abrió las puertas a la política sonorense –los traiciono–; luego brinco a Movimiento Ciudadano y, en su momento al ver que no obtenía beneficios, pues –los traiciono–; ahora aparece en morena y, repite el berrinche que, seguramente terminara traicionando a Alfonso Durazo.
Otra vez debo aclarar: no es misoginia contra la mujer, es, simplemente un análisis de la trayectoria de una servidora pública.
Pero, mejor a’i se las dejo…Radio Sonora ya no es “Una voz para la cultura popular”, hoy es una más como cualquier otra radio comercial…¡¡¡SARAVAH!!!