Proyecto fotográfico en Cuba busca concientizar sobre el cuidado del Medio Ambiente
El geógrafo cubano, Adrián Espinosa (d), conversa con un visitante en la exposición de fotografía de naturaleza «Paraísos susceptibles: Cuba», en La Habana, capital de Cuba, el 5 de julio de 2024. (Xinhua/Li Zijian)
Un proyecto fotográfico del geógrafo cubano Adrián Espinosa busca concientizar sobre el cuidado del Medio Ambiente y los efectos del cambio climático en la isla caribeña.
Espinosa, quien es profesor de Geografía de la Universidad de La Habana, desde el 2016 se acercó a la fotografía de manera autodidacta, y en la actualidad combina su profesión y su hobby para enviar un mensaje ambiental a las futuras generaciones.
«Paraísos susceptibles: Cuba», es el nombre de su más reciente exposición personal la cual se integra a su proyecto mayor de fotografía de naturaleza, con el que pretende sensibilizar y educar acerca de la fragilidad de los ecosistemas cubanos y la importancia de su conservación.
«Todos los lugares de Cuba tienen riesgo desde el punto de vista del cambio climático y para mí resulta muy importante defender el Medio Ambiente a través de la imagen», aseguró a Xinhua.
Con recursos propios Espinosa ha recorrido casi todas las provincias cubanas captando imágenes de paisajes, flora y fauna locales, una parte de las cuales muestra al público en «Paraísos susceptibles: Cuba».
La muestra combina la fotografía tradicional con las nuevas tecnologías y está conformada por siete fotografías de gran formato a color, y cinco pantallas de alta resolución, que proyectan otras 75 instantáneas divididas por temas: paisajes, aves, flora, fauna y mariposas.
«Esto persigue objetivos educativos porque la posibilidad de aprovechar las tecnologías nos permite que el proyecto trascienda en el tiempo», dijo el profesor.
Según explicó, quería dar «un mensaje diferente», de ahí que integró a la exposición un mapa de Cuba en línea que permite al público, mediante el escaneo de un código QR, interactuar con más de 150 fotografías que se encuentran localizadas en el sitio exacto donde fueron tomadas.
«Tiene una gran importancia para el desarrollo de las ciencias naturales o de las personas que se dedican a investigar sobre las ciencias naturales a lo largo del país», detalló Espinosa al tiempo que afirmó que esto no es una tarea terminada, sino un proyecto «permanente», ya que cada nuevo lugar que visite será añadido al mapa interactivo.
«El hecho de localizar la especie o referenciar un lugar da la posibilidad de que otros especialistas sepan dónde fue vista determinada planta o comprueben la salud ecológica de determinados lugares», dijo.
Atraídos por el colorido de las imágenes exhibidas en la Sala de Diversidad, en pleno corazón del Centro Histórico habanero, muchos transeúntes visitan la exposición.
Angeline Matos, una pionera de 12 años quien acababa de graduarse del sexto grado, aseguró a Xinhua que es una amante de la naturaleza y que su fotografía preferida fue la del alacrancito, una planta que crece en zonas montañosas con alto grado de humedad.
«Es muy importante proteger el Medio Ambiente, si no, un día vamos a acabar destruyendo completamente el mundo», dijo Matos.
En ese sentido, Martha Pérez, presidenta de la sociedad civil «Patrimonio, Comunidad y Medio Ambiente», de la Oficina del Historiador de La Habana, y directora de la galería que acoge la muestra fotográfica, apuntó que la exposición es «fundamental» para sensibilizar sobre temas ambientales a nivel nacional.
«Es una vía para cooperar con el sistema educativo del territorio y también una opción más de recreación para los visitantes que llegan hasta el Centro Histórico habanero», precisó Pérez.
Habitualmente en su trabajo Espinosa capta imágenes de sitios poco conocidos de la geografía cubana, ya que según considera, «cada lugar de Cuba tiene cosas muy bellas que mostrar».
Su aspiración futura, según contó a Xinhua, es que su proyecto pueda contribuir además a desarrollar el turismo fotográfico en lugares de la isla que comúnmente no han sido tenidos en cuenta como destinos para esta actividad especializada.
«Sería una gran oportunidad para que los visitantes que llegan a nuestro país conozcan la flora y fauna locales y además puede constituir una fuente de ingresos para las pequeñas comunidades que habitan en esos lugares», concluyó.
(Web editor: Zhao Jian, 周雨)