Oppa propone reflexionar sobre la canalización de la angustia y la tristeza
▲ El elenco se integra por Emma Malacara, Alfredo Veldañez y Xóchitl Franco.Foto María Luisa Severiano
Daniel López Aguilar
Periódico La Jornada
Domingo 14 de julio de 2024, p. 3
La obra Oppa, de la dramaturga Patricia Martínez Pedreguera, comenzó nueva temporada ayer ante un abarrotado Foro La Gruta del Centro Cultural Helénico.
En entrevista, la también directora de escena y docente explicó que con este montaje encontró una forma de canalizar su ansiedad y depresión durante la pandemia de covid, ya que en pleno confinamiento sufrió un colapso existencial cuando se vio obligada a alejarse un poco de las artes escénicas para impartir clases de expresión corporal vía remota.
La imposibilidad de conectarse de manera presencial con sus alumnos y seres cercanos sumió a la dramaturga en una profunda tristeza. Sin embargo, de esta experiencia surgió la inspiración para desarrollar una historia que aborda temas como el despertar sexual, el enamoramiento, el calentamiento global, la depresión, el suicidio y otros temores adolescentes.
Paco y Lu están a punto de ingresar a la preparatoria, pero a la vez enfrentan los cambios físicos y emocionales que ello conlleva. A medida que transcurre la trama, ambos amigos experimentan el despertar sexual mientras comienzan a percibir un mundo diferente a su alrededor, como la aparición de un tercer personaje, la sombra, quien cambiará su vida para siempre.
“La obra no sólo va dirigida a los jóvenes, sino también a los adultos, aunado a que pretende generar reflexiones sobre cómo afrontamos las cosas que nos agobian y entristecen. Oppa es una palabra coreana que significa mejor amigo mayor”, añadió Patricia Martínez (Ciudad de México, 1993).
Desde su estreno, el montaje no ha tenido modificaciones profundas; sin embargo, junto con mi compañía La Voz de las Cosas, integrada por Daniel Lemus, Tania Vázquez, Ana Galán y Valeria Navarro, hemos tratado de enriquecer la narrativa mediante títeres, teatro de sombras e iluminación, a cargo de Isaías Martínez y Sara Alcántara. La escenografía minimalista es de Pablo Galán.
El elenco se integra por Xóchitl Franco, Alfredo Veldañez y Emma Malacara, quienes logran captar la atención y el aplauso de la audiencia. Sin embargo, además de la diversión y el entretenimiento también enfatizan un mensaje esencial: no permitir que nuestras sombras y dificultades personales nos controlen.
▲ Los actores enfatizan un mensaje esencial: no permitir que nuestras sombras y dificultades personales nos controlen.Foto María Luisa Severiano
Los actores recordaron a los asistentes la importancia de reconocer los momentos en que necesitamos apoyo profesional y emocional.
En 2021, Patricia Martínez Pedreguera fue distinguida con el Premio Bellas Artes de Obra de Teatro para Niñas, Niños y Jóvenes Perla Szuchmacher por Oppa. Dicho reconocimiento la ha impulsado a seguir explorando narrativas dedicadas a la población juvenil.
Mi intención es generar propuestas interesantes, pero sobre todo provocadoras. Al recibir el galardón tuve una sensación de seguridad y de confianza para seguir aventurándome en la dramaturgia; poco a poco se han ido abriendo caminos muy emocionantes: en 2025 haremos una gira en Puebla y presentaremos la puesta en escena en todas las telesecundarias del municipio de Zihuateutla
, en el mismo estado, adelantó.
“Las artes escénicas son esenciales en la construcción de un futuro más prometedor porque promueven el diálogo con el espectador, además de profundizar en las complejidades de la vida. Fomentan habilidades cruciales como el trabajo en equipo, la negociación y la escucha activa, así como espacios de encuentro.
“El teatro es una herramienta valiosa para el aprendizaje del trabajo en equipo y de la negociación, de la escucha del otro, del valorar la opinión y la visión de los demás y también poner en juego la propia. Esta interacción en un espacio creativo permite a los jóvenes construir en conjunto, aprender a valorar las perspectivas ajenas y desarrollar una comunicación efectiva.
El teatro es un motor para la creación de nuevos públicos. Al involucrar a los jóvenes, se fomenta su interés por las artes y se les invita a ser parte activa de la comunidad cultural. Esto no sólo beneficia a los individuos, sino que también fortalece el tejido social al promover la cultura y el arte como elementos centrales de la vida comunitaria.
Las funciones de Oppa son los sábados y domingos a las 13 horas en el Foro La Gruta del Centro Cultural Helénico (Revolución 1500, colonia Guadalupe Inn).
Los boletos cuestan 238 pesos, con descuentos para maestros, alumnos y personas de la tercera edad con credencial del Inapam. Concluirá el 4 de agosto.