La nave Starliner regresa a EE.UU. sin sus dos astronautas tras presentar fallos en su funcionamiento
La nave Starliner de Boeing ha aterrizado sin tripulantes en White Sand, en Nuevo México (EE.UU.), después de un viaje de seis horas. La cápsula se desacopló el viernes sin problemas de la Estación Espacial Internacional (EEI), a la que llegó en junio pasado.
En la EEI, se han quedado los astronautas Barry ‘Butch’ Wilmore y Sunita ‘Suni’ Williams, al no poder embarcar por problemas técnicos, pero se espera que puedan volver en febrero en una nave de SpaceX.
El viaje hacia Nuevo México (EE.UU.) supone el fin de la compleja misión de prueba de la cápsula, que de una estancia planeada de ocho días en la EEI finalmente ha vuelto al cabo de tres meses, tras una serie de problemas con el sistema de propulsión y fugas de helio.
Una misión accidentada
La que fuera la primera misión tripulada de Boeing, empresa que con este viaje busca la certificación oficial de la Starliner, ha sido algo accidentada. Despegó desde Florida el pasado 5 de junio y luego se acopló con éxito al laboratorio orbital.
Tras varios problemas, se optó por que los astronautas permanecieran en la EEI y solo regresara la nave. La cápsula se ha desacoplado con éxito del laboratorio orbital a las 18:04 hora local (22:04 GMT) del viernes y ha llegado a Nuevo México en paracaidas a las 00:01 hora local (04:01 GMT) del sábado.
Después de separarse suavemente de la EEI, la nave ha efectuado una secuencia programada de 12 encendidos cortos de propulsión que la ha lanzado lejos de la estación, tal como estaba planeado, y ha llegado a la denominada «zona de seguridad» para después realizar otros encendidos sin problemas.
Steve Stich, directivo del Programa de Tripulación Comercial de la NASA, expresó esta semana que las fugas de helio en la nave posiblemente están vinculadas a la corrosión de unos sellos y no cree que sea necesario un nuevo diseño de propulsores.
La SpaceX para los astronautas se lanzará el 24 de septiembre
El lanzamiento de la misión Crew 9 desde el Centro Espacial Kennedy de Florida en una nave de SpaceX, en la que regresarán los astronautas de Starliner, está previsto para el próximo 24 de septiembre.
La misión, de seis meses de duración y que supondrá la novena rotación de tripulación en la EEI que emprenda SpaceX para la NASA, no despegará con los cuatro tripulantes planificados inicialmente, sino solo con dos, para dar espacio a los dos astronautas de Starliner ‘atrapados’ en la EEI.
Este primer vuelo del Starliner con tripulación, realizado con años de retraso debido a diversos contratiempos, debía ser la prueba final antes de comenzar sus operaciones regulares para la NASA como segundo proveedor, después de su competidor, SpaceX, para el transporte de misiones tripuladas y de carga al laboratorio orbital.